Flamenco y Emociones

El Flamenco surge de la rica fusión entre diversas culturas, pero también de la necesaria expresión de las voces de su gente. Con el cante, el baile o el toque afloran las emociones que infunde el sentir de un pueblo. El movimiento de sus cuerpos, la gestualidad de sus rostros o la tonalidad de sus cantes canalizan aquellos sentimientos que fluyen desde el pasado.

El profesorado que participamos en el proyecto “Vivir y SENTIR el Patrimonio” creemos que no puede existir un desarrollo cognitivo y personal sin una correcta gestión de las emociones y que la cultura debe servir de puerta que comunique las experiencias pasadas con las vivencias presentes.

Este portal hacia los sentimientos creemos puede traspasar la mente de nuestro alumnado, y despertar a sus emociones, porque el flamenco es alegría y es tristeza, porque nos consuela y nos duele y porque del amor y del desamor de la vida, el flamenco siempre está ahí, acompañándonos hasta en la soledad.

Es por todo esto que hemos querido preguntar a nuestro alumnado qué emociones les transmiten algunos de estos palos del Flamenco. Para el desarrollo de esta actividad, se ha seleccionado un palo por cada provincia andaluza y se ha utilizado la aplicación de Mentimeter para analizar qué emoción es la que prima con cada uno de estos palos.

A continuación, os dejamos fotos y enlaces a la actividad y al resultado.

Queremos agradecer a Antonio Najarro el sentimiento que le pone a la difusión del Flamenco y porque ha sido nuestra inspiración para buscar la parte más íntima y emocional de este Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.