Los fusilamientos del 3 de mayo
Nos encontramos ante la obra “Fusilamientos del 3 de mayo” del artista Goya alrededor del año 1814 con la técnica óleo sobre lienzo con el género histórico y de estilo romántico. Hoy en día podemos disfrutarla en el Museo del Prado
Como ya he dicho, el género es histórico donde el protagonista es el pueblo de Madrid, que sufre por el levantamiento de 3 de mayo de 1808 en la montaña de Príncipe Pío, a las afueras de Madrid. Este levantamiento ocurre como castigo por parte del ejército napoleónico por el levantamiento popular del día anterior en las calles de Madrid, momento que también reflejó Goya en su obra “La Carga de los mamelucos».
Su composición se organiza a través de la iluminación del foco del suelo ya que la acción se desarrolla en la noche, que divide la escena en dos, una parte iluminada y otra oscurecida. Esta iluminación tenebrista ilumina de forma dramática incrementando los sentimientos de la obra.
En la parte iluminada se encuentra el pueblo protagonista, un grupo de patriotas individualizados que pasan por 3 fases, la primera parte podemos ver como los patriotas son detenidos y dirigidos hacia su muerte, en la segunda fase los detenidos se colocan ante el pelotón de fusilamiento y en la última fase podemos ver como los patriotas ya están muertos. Destaca el patriota ajusticiado que está en el centro abriendo sus brazos aceptando su destino, es el más rebelde ya que aun siendo el momento de su muerte sigue gritando, además es a quien le cae más luz. También destacamos a otros patriotas, esta vez en la derecha, como uno que muestra una expresión de terror ya que se encuentra en la primera fase y ve lo que le espera.
En la parte oscurecida se encuentra el pelotón de fusilamiento, están pintados de espaldas convirtiéndolos en anónimos como símbolo de la guerra como máquina de matar. Su composición es triangular donde su vértice está en el espacio entre los patriotas, además sus pies forman triángulos resaltando el estatismo, lo cual aumenta por los fusiles rectos.
Al fondo de toda esta acción se encuentra la montaña de Principio Pio y la ciudad oscurecida.
Las pinceladas con sueltas y con manchas de color. En la gama de colores vemos tonalidades oscuras que incrementa el ambiente de muerte, estos colores son el negro, ocres, verdes, marrones, el rojo de la sangre y azules, los colores mas claros son los de la ropa del personaje ajusticiado, del cual distinguimos tonos blancos en su camisa y amarillo en su pantalón.
Los personajes que están de frente, los patriotas, muestran gran expresividad en sus caras, muchas de ellas están deformadas y sus contrastes cromáticos le hacen precedente del expresionismo.
La evolución histórica y la pictórica-biográfica de la etapa donde se realiza esta obra, coinciden con los Tapices; la sordera y la involución por la Revolución francesa, tienen como consecuencia un espíritu crítico y pesimismo en los grabados. Goya, en la guerra de independencia debate entre sus ideas ilustradas y su patriotismo, ocasionando que su estilo evoluciona a las pinceladas rápidas, sueltas, manchas y una gran expresividad de los rostros.
Tras la guerra empieza el absolutismo del rey Fernando VII. Ante esto, Goya se desilusionará por la ignorancia y la irracionalidad que dan fin a su esperanza de cambios.
Desde mi punto de vista es una gran obra que representa uno de los momentos de la historia más terroríficos, no me imagino lo que tuvieron que sentir al ver como sus patriotas estaban muertos, a unos los estaban matando y los siguientes eran ellos, simplemente inimaginable.
Buen trabajo.