Después de casi una década retomamos la grisalla sobre vidrio
En junio de 2013 se hizo un amago o intento de aprender a pintar vidrio.
La falta de tiempo y otros problemas imposibilitaron que se siguiera experimentando. Este año la instalación eléctrica ya empieza a dar problemas.
Si logramos que no salten los fusiles… ya veremos qué saldrá en la primera prueba ensayo-error. Empezaré con pruebas de cocción. La primera cocción a 630º con una primera veladura sin goma arábiga. Ya mostraremos el resultado. Ojalá podamos realizar otra segunda veladura con marrón.
Es lo que tiene tener que aprender de forma autodidacta; se aprende a base de tropiezos. Como añoro los tiempos en que se formaba al profesorado en las materias que impartía. Hace diez años que quise aprender a pintar vidrio. El doble de tiempo hace que no doy un curso del CEP para aprender o profundizar en técnicas artísticas. Los cursos que hacia en Valdepeñas cuando era funcionario de Castilla-La Mancha eran mucho más útiles en mi práctica docente que los actuales.
El profesorado, por lo menos ese es mi caso, quiere elaborar actividades propias aplicables en el aula, ejercicios prácticos reales. Es mi opinión, la de un profesor algo nostálgico que envejece en años pero quiere mantener la inquietud de antaño.
Y es que desde hace tiempo los cursos relacionados con la modalidad de artes que he querido hacer en Andalucía los he tenido que costear de mi bolsillo. Aunque esto será cosa extensible al resto de España; ponerse al día en una legislación cambiante parece vital y lo demás secundario. Aunque yo pongo en duda que el alumnado se acuerde de cómo le evalué y cómo le califiqué; recordará sobre todo lo que aprendió a hacer.
Les he prometido a mis alumnos de segundo de bachillerato de artes que haremos una orla con sus autorretratos. Espero no fallarles. Por fin este año dispongo de un horario amplio para poder innovar en prácticas reales, con proyectos a largo plazo en los cuales los resultados sean dignos de ser mostrados. Disfrutaré mientras dure el espejismo. Recuperadas las cuatro horas de artes (2 de Dibujo Artístico I y 2 de Volumen), ahora puedo incluir actividades novedosas. Y pintar vidrio será un curso autodidacta (que en parte volveré a pagar de mi bolsillo) en el cual primero aprenderé yo, y después podré enseñar a mi alumnado. Es un ejercicio muy interesante de grisalla, un buen ejercicio de cómo dibujar desde el lado opuesto: partir de la oscuridad para ir hacia la luz. Metáfora que sirve para seguir viendo al final de tanta burocracia algo de esperanza.
