La conservación y la protección del medio ambiente se realizan, primero, desde el propio hogar y, luego, se amplía a toda la sociedad, aplicando la «regla de las tres erres», es decir, reducir, reutilizar y reciclar:
- Reducir el uso de materiales no renovables, como el plástico, envoltorios, papel y energías no renovables. Comprar productos frescos en lugar de congelados envasados y reducir el uso de detergentes que dañan los sistemas acuáticos.
- Reutilizar todos los productos que sean posibles, como el papel, el vidrio, los envases, etc.
- Reciclar los materiales usados para que puedan ser transformados en otros.
Desde nuestro centro aprendemos a través del Área de Artísticas cómo reutilizar todos los materiales que tenemos en casa.