Un nuevo curso con ARTEMOCIÓN 02/09/2023

El arte es emoción y como tal una potente herramienta para trabajar
con los niños y niñas la conciencia emocional.

Las emociones son estados internos caracterizados por pensamientos, sensaciones, reacciones fisiológicas y conductas que son subjetivos. Son universales, propias del ser humano y sirven, entre otras cosas, para comunicarnos con los demás.

Todas las emociones son válidas y necesarias, no podemos evitarlas, pero sí aprender a manejarlas, ya que tienen una gran influencia en nuestra conducta y nuestro pensamiento. Lo primero para regular las emociones es conocerlas.

Mª José Oliva Marín, coordinadora del Programa Escuela espacio de PAZ, nos invita a que intentemos ser más conscientes de nuestras emociones y de identificar con qué situaciones están relacionadas, así ayudaremos a nuestro alumnado a poner nombre a lo que están sintiendo en un momento dado para que vayan aprendiendo a identificar sus propias emociones y, después, podrán poner en marcha estrategias para regularlas.

El propósito del proyecto son las emociones y los cuadros y audiciones una forma para ayudarnos a empezar a reflexionar. 

Este primer trimestre trabajaremos la GRATITUD.

El sentimiento de gratitud no corresponde a una de las emociones básicas. Todo lo contrario. Para experimentarla se requieren una serie de procesos complejos en la mente. 

A diferencia de otros sentimientos, el de la gratitud no aparece como un  impulso simplemente. La gratitud exige dar y recibir, además de una renuncia a la visión egocéntrica de la vida.

Educar en la gratitud es una labor que a menudo queda olvidada o relegada a un segundo plano, como muchos otros valores. En una sociedad cada vez más  individualista donde se hace necesario recuperar ese vínculo humano que nos aporta cercanía y salud emocional, educar en la gratitud es una necesidad indiscutible.

Lo habitual es enseñar a los niños a decir gracias, cuando alguien nos ayuda, nos presta o nos da algo, sin embargo, termina siendo una frase de cortesía, debemos ir más allá a ser conscientes de lo que implica la gratitud, a reflexionar sobre esos actos de dar y recibir, sobre lo afortunados que somos por lo que tenemos.

Debemos ayudar a los niños a comprender que:
• Cuando alguien hace algo por nosotros no tiene por qué hacerlo y al agradecerle es reconocer su esfuerzo.
• Agradecer todo lo que tenemos, ya que han implicado un esfuerzo para muchas personas y son afortunados por tener.
• Valorar el esfuerzo que los demás hacen por nosotros, como: la cosecha del maíz, que el agua llegue a casa, etc.
• Agradecer que tenemos amigos que comparten tiempo con nosotros y nos quieren, a pesar de las diferencias.

Trabajaremos con el siguiente cuadro con la canción del Arrebato, “Gente luminosa”.

 

Sed felices y nuestros niños y niñas también lo serán.

 

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