UNA PIEDRA EN EL RIÑÓN
El otro día, una de mis alumnas de primero de primaria, me estaba contando, muy preocupada, que su abuelo tenía una piedra gordísima en el riñón, y le dolía mucho. Antes de que me diera tiempo a contestarle, otro de sus compañeros de clase, con los ojos como platos, se levantó de su sitio y dijo con cara de asombro: -Seño, ¿ y porqué se comió su abuelo una piedra?