Día de los derechos del niño/a.
Para celebrar el Día del niño la alumna Irene Romero Herruzo de 5º . ha elaborado este cuento . Érase una vez un niño que sin nombre y sin padres que todos los días y a todas horas pedía limosna para comer un poquito de pan. Empezando la Navidad se envidiaba por las grandes bolsas de regalos y ropa calentita. Él tiritando de frío se le acercó un anciano muy bueno y amable y le dijo: – Tengo que darte un regalo que creo que te gustará: Él niño se acerco sorprendido y le dice: – ¿De verdad que es un regalo? -Si – contesto el anciano. -Dímelo, dímelo.- dijo el pobre niño. -Tú quieres tener una casa, una familia, un nombre, una alimentación, cuidado para que puedas ser feliz e ir a la escuela. El niño le agarro de la mano y le dijo: -Señor yo quiero ser feliz y me iré con tigo. Llegaron a su hogar y era una casa normal. El hombre le dice: -Primero te pondré un nombre y lo llevo pensando y te llamarás Esteban ¿te gusta? -Si me gusta pero antes de otras cosas da me un poco de comer. El hombre le dio fideos calientes y le dice: -Después de comer ve a tu habitación que es la primera a la derecha y la primera a la izquierda es la mía. Y cuando llego a su habitación y cuando le entro ganas de dormir escucha la voz se dos personas. -¿Quién es? Esa voz, esa voz me suena. Las dos vocecillas le dijeron al niño: -Somos tus padres, mejor dicho los espíritus de tus padres que hemos venido a visitarte. -¡Que bien! ¿Cuánto os vais a quedar?- dijo el niño. No nos vamos a quedar mas tiempo solo veníamos a decirte que este hombre es un buen hombre y que no te fueras nunca de su lado. El niño se despertó del sueño siempre estaba al tanto de que algún día le llegara la esperanza de tener derechos y deberes. Irene Maria Romero Herruzo.