Y nos fuimos de casting… ¡a Alquife!
La verdad, al principio me preguntaba: “¿Pero qué locura es ésta? ¿Qué pintamos nosotros en un casting?” Pero las dudas se esfumaron en cuanto los vi llegar, todos con sus camisetas y blusas blanco impoluto, sus sombreros bien puestos y esas caras llenas de alegría. Sí, era una locura, pero una de las buenas. De esas que te sacan sonrisas desde el primer minuto y te regalan una historia más para contar y compartir.
Éramos 22 almas llenas de ilusión, sin saber muy bien a qué íbamos, pero con las ganas por bandera. Nos repartimos en varios coches y allá que nos fuimos, rumbo a nuestro destino con música, risas y mucha expectativa.
Al llegar, nos pusimos en la cola, miramos de un lado a otro y empezamos a sonreír.
Animamos a los que esperaban con la esperanza de ser elegidos, pero lo nuestro era diferente. Nosotros íbamos a disfrutar, a pasarlo bien, a dejar nuestra huella… ¡Y vaya si lo hicimos! Todos conjuntados: las chicas con su pañuelo, los chicos con su sombrero y todos con un cachondeo que no se podía aguantar.
Nuestro patriarca iba que lo tiraba: luciendo con orgullo sus tres plumas en el sombrero, su chaleco elegante, y ese porte de estrella de cine. Solo le faltaba su bastón, que nos lo habíamos olvidado (¡ay, qué cabeza la nuestra!). Aun así, iba como un pincel, irradiando categoría.
De pronto, empezamos a cantar, a movernos, a danzar…¡y llegó el momento de entrar! Pedimos que, por favor, nos dejaran pasar juntos los 22, y nos dijeron que sí. ¡Pues adelante! Rellenamos nuestras fichas como en el cole, y luego… ¡a hacernos la foto! De frente, de perfil… ¡como si fuéramos sospechosos de pasárnoslo demasiado bien!
Eso sí, dejamos bien claro que tenemos experiencia en teatro y baile, que hemos actuado en el Gran Teatro Mira de Amescua, y que incluso tenemos vídeos en YouTube, por si las dudas. ¡Vaya, que somos unos celebritys en toda regla!
Mientras tanto, seguimos inmortalizando el momento con gracia y alegría.
Al salir, nos despedimos del pueblo como si fuéramos una familia flamenca subidos a nuestro carromato, tras una gran actuación.
No faltaron los comentarios: “Acaba de salir un grupo que tiene experiencia en teatro y baile…” – (¡ejem! ¡verdad verdadera!) – o que veníamos de una acampada (una fantasía más para la colección). ¡Incluso nos grabaron en vídeo!
Y cómo no, terminamos la jornada como manda la tradición: celebrándolo con una cervecita fresquita o una jarra de tinto, brindando por lo bien que lo habíamos pasado.
¿Esperanza de que nos cojan? Ninguna. Pero la experiencia, las risas, el desparpajo y poder decir que nos presentamos a un casting… ¡eso no nos lo quita nadie!
Somos geniales. Los Lunerillos del Clan del Patriarca:Chema, Alfonso, Manolo, Antonio, Diego, Juan, María, Paqui, Chari, Cruz, Ana, Piedad, Angelines, Toñi, Carmen, Dori, Antonia, Mercedes, Pepi, Carmela, Pili y yo, Luna.
¡GENIALES, MUY NUESTROS Y CON ESTILO PROPIO!