¡Conseguí mi plaza!

Este curso pasado ha sido un año muy bonito a la vez que intenso en lo profesional, entraba en un nuevo instituto, donde mis compañeros me acogieron desde el primer momento como una más. Un centro muy grande, con mucho trabajo, un horario apretado sin apenas huecos y poco tiempo en la tarde para el estudio al tener también una familia a la que cuidar y atender…

Tras la convocatoria del Concurso de Méritos Extraordinarios y echar mis cuentas con las plazas ofertadas en total junto con las de la Convocatoria de las Oposiciones de Junio de 2023, pensé que si no arriesgaba todo con las oposiciones para poder optar seriamente a una plaza, el próximo curso me vería, con suerte, resignada a trabajar mucho más lejos de casa y con una mayor inestabilidad.

Así que me decidí a ir a por todas con las opos, en vacaciones de Navidad preparé el material de estudio y hablé con dos personas a las que considero unos Ángeles que me pusieron en el camino para que me tendieran sus manos y guiaran en este duro proceso: Alfonso y Mario. Desde entonces nunca dejé las opos, aunque la intensidad y el tiempo que le dedicaba era muy variable, además, algunos días no tenía tantas ganas, otros tenía trabajo y muchos otros días los necesitaba para mi familia. Cada vez que no podía dedicarle todo el tiempo que consideraba necesario me sentía mal y culpable, además no las tenía todas conmigo porque cada vez que llegaba una relación nueva de actividades en ocasiones se me hacía un mundo, y las dudas y la incertidumbre me asaltaban una y otra vez.

Conforme se iba acercando la fecha, iba aumentando la intensidad de estudio a la vez que me iba desentendiendo de todo lo relacionado con mi familia y amigos. Fue todo un acierto tomar la decisión marcharme a estudiar a aquel rincón, alejada de casa y donde podía trabajar con toda la tranquilidad y concentración que yo misma me permitía. ¡GRACIAS!

Casi en un abrir y cerrar de ojos llegó ese deseado, a la vez que detestado 18 de junio, me presentaba por cuarta vez a las oposiciones, pero no iba nerviosa, estaba tranquila y satisfecha por todo el trabajo que había ido desempeñando, era consciente de mi evolución dentro de mis circunstancias, había dado el 200% de mí misma y pasase lo que pasase me consideraba ya una ganadora por todo lo que había logrado aprender y mejorar.

Creo que una de las cosas que mejor pude hacer para dejar a un lado esos nervios fue cantar la tarde antes en la Coronación de Nuestra Señora de la Amargura de mi ciudad, agradezco a Sergio, el Director del Coro, la oportunidad que me brindó y a mis compañeros y compañeras del Coro por su apoyo. Cantar con vosotros fue mi mejor terapia para desconectar de las opos. ¡Gracias!

Tras un largo tiempo de espera, esa mañana del 18 de junio salió la bolita, esa suerte con la que muchas veces había soñado, no me lo creía, el Tema 26. Miré a mi alrededor, respiré hondo y me estructuré el índice del tema y el guión de lo que iba a desarrollar en cada apartado. Acto seguido me lancé a la realización de la muy temida parte práctica, de la que pude hacer casi dos ejercicios de los tres que se pedían. Pasado el tiempo que consideré oportuno me puse con el desarrollo del Tema, ¡hasta trece folios numeré!. Se me pasaron esas cuatro horas y media casi en un abrir y cerrar de ojos. Salí del examen satisfecha de haberlo podido defender como nunca antes lo había hecho, ¡había conseguido uno de mis propósitos!.

Nada más salir, agradecí a mis Ángeles su dedicación conmigo, me acordé muchísimo de ellos durante la prueba, me sentí poderosa y con la confianza de haber ido haciendo las cosas relativamente bien. Luego hice lo mismo con mi familia y amig@s que considero también familia, todos ellos juntos han sido Mi Equipo, mi talón de Aquiles en todo este proceso y con quienes he ido descargando toda la tensión que iba acumulando, pero conforme les iba contando cómo me había ido, iban creciendo las dudas y las inseguridades, pues no sabía finalmente cómo iba a resultar todo. 

Como quedaban doce días de espera para conocer las notas, me quería dar una licencia, una desconexión de opos, y así aprovechar para cerrar el curso en el instituto con cierta tranquilidad. Pero esos Ángeles decidieron que en el plazo de una semana yo fuese la primera en exponerles mi Programación y Unidad. Así que se fueron al traste mis días de desconexión y a la vez que me preparaba esa parte oral, las pesadillas con el examen iban creciendo exponencialmente (se me veían a la mente una y otra vez ejercicios de la práctica o apartados del tema escrito, soñaba con conversaciones con el tribual, etc.). Una vez hice el simulacro del oral, salí también contenta por haberlo podido defender, aunque con muchísimos flecos por rematar, pero la mayor parte del trabajo estaba hilado y tenía margen de tiempo para afinar esos remates si finalmente pasaba el corte del examen.

El mismo 30 de junio me lo había tomado de permiso para poder ayudar a mis hijos a preparar sus maletas para el campamento de verano y así evadirme de esa angustiosa espera, pero recibo una llamada del Director para tener que resolver en el instituto con mi Equipo Docente una reclamación, al finalizar esa reunión me llegan noticias de que han publicado las notas, yo me temía lo peor y quería descubrirlo en la intimidad de mi casa y con los míos. Pero me llamó mi compañero de amarguras en esto de las oposiciones, Ángel, y no sabía si cogerle o no la llamada, los miedos y dudas me anulaban casi la capacidad de actuar (es increíble la situación tan límite a la que te pone un sistema de oposiciones así), finalmente gracias a los ánimos de mis compañeros, descolgué el teléfono y, a pesar de ponerme muy triste porque él no había pasado la prueba, me dió la noticia de que yo había aprobado y la emoción se apoderó de mí. ¡Qué detalle más bonito tuvo mi amigo, a pesar de su situación! ¡Gracias Ángel!

Y a partir de ahí no cesaron los nervios porque no volvería a tener una oportunidad así. Desde ese 30 de junio y hasta el 25 de julio han sido unos días de muchísimo trabajo, nervios, llantos, risas, emociones a flor de piel… Y tras ver mi nombre en la lista de seleccionados, pude respirar y decirme: ¡lo has conseguido!

No puedo terminar este post sin terminar de agradecer, la primera culpable de que yo haya llegado hasta aquí no es otra que María de los Ángeles, ella fue quien me animó a prepararme las oposiciones de secundaria allá por 2008. ¡GRACIAS!

Todo esto no habría sido posible sin el apoyo de mi Familia, que prácticamente han sido como mis manos y pies, en definitiva: mi sustento, que junto a esos Amig@s conformáis MI EQUIPO, que siempre han estado ahí para apoyarme, escucharme y darme ánimos. ¡Os quiero infinitamente! ¡Soy muy afortunada de teneros en mi vida! ❤️

Y tampoco habría sido posible sin la ayuda de mis preparadores, Alfonso y Mario, como ya os he dicho, sois unos verdaderos Ángeles, trabajadores incansables y siempre dispuestos a mejorar y ayudar. ¡GRACIAS!

Enhorabuena a todos los que habéis sacado plaza en esta convocatoria, aunque permitidme, que haga una mención especial a mis compis del grupo de oposiciones, a mis compis de tribunal: Lucía y Natalia, y, por supuesto también a Merche, otra campeona.  🎉 ¡Lo mejor ha sido compartir este arduo proceso y logro con vosotr@s! 🎉

Y a los que no, ¡no abandonéis jamás!, este proceso es como una carrera de larga distancia y no dice quién es buen profesor y quién no, solo a quién le acompaña también la suerte. Estoy segura de que más pronto que tarde podremos celebrar vuestra plaza. 

Se despide una Funcionaria en Prácticas 😊,

Débora

También te podría gustar...

1 respuesta

  1. Rocío dice:

    Esa plaza tenía tu nombre, siempre lo supe! Te mereces todo lo mejor que te pase cariño y siempre estaremos contigo para celebrarlo!

Deja una respuesta

Descripción general de privacidad

Este sitio web utiliza cookies para que podamos brindarle la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en su navegador y realiza funciones como reconocerlo cuando regresa a nuestro sitio web y ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones del sitio web le resultan más interesantes y útiles.