Cuando los niños son bebés sus padres son una especie de héroes y no hay nada que hagan mal. Aunque cierto es que, con el paso de los años, llega un momento en el que comienzan a cuestionar a sus progenitores y todo lo que hace está mal. Es ahí conde entran en juego las malas contestaciones. Esto no quiere decir que sea algo totalmente malo, sino que es bueno que tu hijo tenga su propia opinión sobre las cosas aunque cierto es que el problema llega cuando el niño comienza a responder a todo de una forma totalmente inadecuada, llegando a ser incluso hasta agresiva.
Esta es una etapa muy conflictiva y que suele ocurrir a partir de los 6 años de edad, momento en el que los padres tienen que estar preparados para lograr sobrellevar esta etapa e intentar que sus hijos aprendan a aceptar las normas de forma dócil. A continuación te ofrecemos 10 consejos clave para que abordes esta etapa de la mejor manera posible.
1.- No es algo personal
No te enfades si tu hijo te contesta mal constantemente ni te lo tomes como algo contra tu persona. Esta forma de cuestionar todo lo que haces o dices, básicamente, se debe a una forma de autoafirmarse. Si eres consciente de esto, podrás abordar la situación de forma más sencilla.
2.- No a la desesperación
Es normal que si tu hijo empieza a dar malas contestaciones por todo, llegue un momento en el que te desesperes. Mantén la calma y no caigas en el conflicto, es una etapa que acaba terminando.
3.-No darle importancia
Como ya te hemos indicado, esta es una etapa totalmente pasajera. Lo mejor es que no le des mucha importancia para así no reforzar este comportamiento de tu hijo.
4.- Descubre los motivos
Toda mala contestación tiene una causa (puede que tu hijo esté estresado o cansado o molesto por algo). Por lo tanto, lo mejor será que le preguntes qué es lo que le pasa y que le observes cuando te conteste.
5.- Da ejemplo
Como hemos dicho antes, los niños suelen imitar a sus padres en todo (o casi todo), así que lo mejor es que no pierdas las formas y nunca te vea darle malas contestaciones a nadie. Dando ejemplo, conseguirás respeto en la comunicación y que tu hijo te trate con respeto.
6.- Ofrécele alternativas
Puede que tu hijo te responda mal en algún momento pero, como ya te hemos indicado, lo mejor no es comenzar una discusión sino explicarle que esa no es la mejor forma de expresar sus sentimientos y/o ideas. Con ello, validarás sus sentimientos pero no su forma de expresarse.
7.- Expresa tu cariño
Una de las cosas fundamentales que tiene que entender tu hijo es que aunque se porte mal, le sigues queriendo. Para hacérselo entender, lo mejor será decirle frases del tipo: «Te quiero mucho pero no voy a tolerar ese comportamiento» o «No creo que hayas querido decir eso porque sé que me quieres mucho».
8.- Critica su comportamiento
Lo que debes castigar, en estos casos, siempre es la conducta y no al niño. Es por eso por lo que mejor que decir «eres arrogante», tendrías que decir «te has comparado de forma arrogante».
9.- Gestión de las emociones
Otro consejo fundamental para intentar sobrellevar las malas contestaciones en tu hijo es enseñarle a que gestione sus emociones. Para ello, muéstrale diferentes técnicas de autocontrol para que así pueda calmarse y expresarse de mejor forma.
10.- Haz que reflexione
Muchas veces los niños se comportan y dan malas contestaciones de forma impulsiva. Es por eso por lo que será ideal si le haces reflexionar sobre sus propias palabras. Esto no debes hacerlo en el momento, sino que lo mejor será que esperes a que se calme y le pidas que se ponga en tu lugar y que reflexione sobre cómo te hizo sentir.
