Al querer tener una buena relación con nuestros hijos es normal que de vez en cuando bromeemos con ellos, pero en algunas ocasiones podemos llegar a lastimar sus sentimientos sin siquiera darnos cuenta de que la broma realmente no salió como queríamos. Es por eso que debemos de hablar de las burlas de los padres y el efecto que estas pueden llegar a tener en los pequeños.
Generalmente las bromas que pueden llegar a tener un efecto negativo suelen ir acompañas de burlas que pensamos que son inofensivas y que no pasa nada. Sin embargo, no sabemos realmente como se ha sentido y esto puede llegar a afectarlo o nuestra relación con él más de lo que imaginamos.
Es normal que uno como padre piense que una broma bien intencionada no puede causar ningún daño, pero lo cierto es que este tipo de bromas pueden hacer que los pequeños se sientan mal. Así que debes de saber que las burlas de los padres realmente pueden llegar a ocasionar un gran daño en la autoestima de los pequeños, aunque a simple vista pienses que se trata de una broma bien intencionada.
¿Qué efectos negativos pueden tener las burlas de los padres en los hijos?
Afecta la confianza
Las burlas no son una forma de comunicación, simplemente son burlas. Sin duda alguna uno de los grandes pilares que se tienen que mantener cuidados en la relación entre padres e hijos es la confianza, la cual se puede ver seriamente afectada por las burlas de los padres.
Es muy importante que los niños confíen en sus padres y que se sientan seguros cuando están con ellas. Lo único que consiguen las burlas es hacer que se sientan inseguros y que no se sientan cómodos o en sintonía emocional con los padres.
Problemas de ansiedad
Las burlas de los padres hacia los hijos también pueden ocasionar problemas de ansiedad. Está claro que ni a niños como a adultos les gusta sentir falta de confianza e inseguridad, sobre todo cuando esto proviene de los padres.
Las burlas pueden llegar a convertirse en un gran problema para los niños, lo que puede fomentar que se presente soldad (aislamiento para no recibir más burlas) y problemas de ansiedad, así como pensar que sus padres no lo quieren, lo que afecta drásticamente la autoestima y el vínculo con los padres.
Vergüenza
Las burlas suelen provenir de “defectos” o comportamientos involuntarios de el niño, haciendo que sienta vergüenza cuando los padres ser burlan de él o cuando lo hacen frente a otros miembros de la familia.
No hay ningún motivo por el que sea bueno burlarse y menospreciar a los hijos, ya u de esto sólo saldrán efectos negativos y se generara una falta de respeto hacia su persona, lo que más adelante ocasionara problemas de comportamiento.
Depresión
Ya mencionamos como las burlas de los padres pueden llegar a despertar una serie de sentimientos negativos en los niños, lo que puede orillarlo a sufrir de depresión infantil, una enfermedad bastante grave que necesitará de una evaluación médica.
Como puedes ver, las burlas de los padres nunca tienen un efecto positivo en los hijos. No sirven para mejorar la relación, sino que hacen todo lo contrario. Se pueden hacer bromas, pero nunca relacionadas hacia su persona o hacia las demás personas.