Los celadores sanitarios son parte de la plantilla de los hospitales, pero no son parte del personal sanitario al no tener formación médica. Su función es muy importante, ya que ellos son los que se encargan de trasladar a los pacientes y los instrumentos a donde sean necesarios.
Entre sus funciones, se encuentran la movilización de pacientes, pero realizan muchas más tareas.
Para entender cuál es su papel, así como saber sus funciones y los requisitos para ser un celador hemos preparado esta guía explicativa en la que os contaremos todo lo que necesitas saber sobre estos profesionales sanitarios.
¿Qué es un celador?
Los celadores sanitarios forman parte del personal de un hospital, pero no cuentan con formación sanitaria. Los celadores son necesarios en el día a día de los centros sanitarios y hospitales.
Esta figura se ocupa de todo lo necesario para el mantenimiento diario y realiza tareas muy importantes. El trabajo de un celador abarca muchos apartados.
Entre sus funciones destacan las siguientes:
- Ayudan al personal sanitario con el traslado de pacientes a plantas y/o sitios para realizar pruebas como acudir a la sala de rayos X, etcétera.
- Realizan pequeñas tareas de mantenimiento e informan de desperfectos y averías para su reparación.
- Son los encargados de vigilar la entrada de personal y suelen estar a la entrada de los hospitales. Pueden actuar en turnos nocturnos o diarios para realizar esta tarea tanto dentro como fuera del hospital.
- Son los responsables de mover el instrumental y mobiliario necesario para realizar diferentes test y pruebas médicas.
- Velarán por mantener el orden y el silencio en el interior de las estancias médicas.
- Pueden ejercer de ascensoristas para pacientes y personal médico, siempre que se lo soliciten.
- Excepcionalmente, pueden realizar labores de limpieza, según diversas circunstancias como el difícil manejo de un aparato o acceso a un lugar difícil, entre otras.
A modo resumen, se puede decir que un celador es personal no sanitario que asiste a los médicos y enfermeros en todo lo que necesiten.
Requisitos para trabajar como celador
Ser celador no es difícil siempre que pases unas pruebas y cumplas ciertos requisitos.
Entre ellos se encuentran los siguientes:
- Tener un mínimo de 16 años en el momento de acceso al proceso de selección. Asimismo, tampoco se puede superar la edad máxima de jubilación.
- Poseer la nacionalidad española o la de un país o estado miembro de la UE.
- Contar con el certificado escolar o su título equivalente como es la ESO o Educación Secundaria Obligatoria.
- No tener acceso a un puesto de las mismas características.
- Pagar las tasas necesarias para realizar las pruebas.
- Tener la capacidad mental y física para desarrollar todas las funciones de un celador.
- Contar con el máximo de puntos en el apartado de formación continua para formar parte de las listas. Este aspecto es opcional, pero es clave ya que sumar lo máximo posible de puntos (formación y experiencia) es la diferencia a la hora de entrar en una bolsa SAS y que no hay una titulación oficial para ser celador, solo el certificado escolar.
- No haber sido despedido o expedientado por indisciplina de un puesto de trabajo público. También se incluye que no haya sido inhabilitado para realizar trabajos públicos.
En caso de cumplir con todos estos requisitos se puede realizar las pruebas de acceso para ser un celador en el SAS o en cualquier otro Servicio de Salud de otra Comunidad Autónoma.
Los motivos por los que mucha gente decide opositar para ser celador es que es un puesto de trabajo de por vida, el equivalente a ser un funcionario.
Una vez se aprueba el examen para ser celador se consigue una plaza de trabajo de por vida, con muy buenas condiciones económicas (unos 1.300 euros al mes con sus correspondientes 14 pagas y media).
La estabilidad laboral que ofrece este puesto de trabajo es otro de los atractivos de estos profesionales.
¿Dónde puedo realizar cursos online?
En la actualidad no existe una formación específica para ser celador en el SAS.
Las personas que quieran acceder a este puesto de trabajo deben tener la formación suficiente para ejercer de celador, así como unos conocimientos básicos sobre las funciones que van a realizar.
En este sentido, realizar un curso de celador es el mejor método para formarse en esta profesión y sumar los puntos necesarios que requiere el baremo.
A mayores, pueden formarse realizando cursos online que suman puntos en la parte de méritos.
Esta formación pueden ser la diferencia a la hora de acceder y puntuar lo máximo posible en el baremo de las bolsas del SAS.
Y es que las pruebas de acceso para ser celador en el SAS funcionan mediante el método de concurso-oposición.
Se realizarán dos pruebas: una teórica y otra práctica. La teórica consta de unas 100 preguntas en formato test con 4 posibles respuestas. Por cada cuatro preguntas falladas se resta un punto del total.
Las respuestas a las preguntas teóricas forman parte de un temario que se suele actualizar cada año.
¡Prepararse para ser celador es una carrera a largo plazo que merece la pena siempre que se den los pasos necesarios para formarse y superar el proceso!