El Instituto Nacional de Estadística sitúa a Andalucía, Comunidad de Madrid, Cataluña y Comunidad Valenciana como las regiones de España que más centros educativos de enseñanza no universitaria concentran. Independientemente de su localización geográfica, y del número de alumnos que cada día visitan sus aulas, los colegios también son vulnerables ante los incendios. Por este motivo, el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad del año 2017 decidió aprobar el Reglamento de instalaciones de protección contra incendios (Real Decreto 513/2017, de 22 de mayo).
En uno de los artículos de esta normativa legal, se indica la periodicidad con la que se deben revisar los sistemas que el colegio ha implementado para hacer frente al fuego: extintores, columnas secas… Con todo y con eso, una vez se ha producido el incendio en la escuela, sólo cabe recuperar lo perdido.
Nano Nex lleva desde 1994 ocupándose de las labores de limpieza después de un incendio. Dada la complejidad que presenta un centro escolar, por la cantidad de materiales, superficies, elementos estructurales y medidas de seguridad a tener en cuenta en baños y comedores, el equipo profesional de esta empresa utiliza tecnología de vanguardia con la que completa, rápida y eficientemente, el proceso de desinfección.
No obstante, para quienes necesitan limpiar las dependencias del centro lo antes posible, hay una serie de consejos que profesores y alumnos pueden seguir a fin de retomar la rutina escolar habitual sin temor a inhalar gases tóxicos, generados por el incendio.
Informar a los estudiantes, el primer paso
El primer paso para minimizar el impacto del incendio en el centro escolar consiste en informar al alumnado sobre el riesgo que el humo entraña para la salud física. Los estudiantes necesitan ser conscientes de que dicho humo se compone de los gases tóxicos y las partículas microscópicas que la combustión de toda clase de materiales —desde la madera de los pupitres hasta la tela de las mochilas— ha emitido.
El Instituto de Tecnología de la Construcción afirma que las estadísticas europeas y nacionales identifican la «inhalación de humo» como la responsable de más de la mitad de las muertes tras un incendio.
Los estudiantes necesitan saber que hay dos tipos de gases tóxicos en el humo de un incendio. ITeC los clasifica en:
- Irritantes (ácido clorhídrico, óxidos de nitrógeno…).
- Asfixiantes. En esta categoría, se incluyen dos muy conocidos: el monóxido y el dióxido de carbono.
Para eliminar el humo definitivamente y estos gases anteriores, conviene suprimir aquello que todavía puede liberar partículas microscópicas capaces de producir enfermedades crónicas, impactando negativamente en el corazón y en los pulmones del personal y del alumnado.
Hay varios métodos. Estos consejos, explicados en el siguiente apartado, pueden recopilarse en un blog online como los que docentes de más de 900 centros educativos han decidido crear con BlogsAverroes, un servicio promovido por la Junta de Andalucía. De esta manera, cualquier persona vinculada al colegio (padre, profesor, alumno, cocinero, técnico de mantenimiento…) tiene la posibilidad de acceder en línea a la información que el profesor o el centro en cuestión habría publicado sobre cómo efectuar una correcta limpieza de incendios en cada una de las dependencias de la escuela.
Empezar a limpiar el colegio tras el incendio
Nano Nex recomienda:
- Cubrir ventanas, paredes y techos con lonas. De este modo, se consigue aislar el espacio y evitar la entrada de humo procedente de zonas contiguas (por ejemplo: el humo de las aulas vecinas).
- Si se ha utilizado agua para intentar sofocar el fuego, se aconseja eliminar toda la cantidad de agua posible, secar cuanto antes el espacio y utilizar un deshumidificador para extraer la humedad del aire.
- Emplear también nebulizadores que arrojen un aroma distinto al del humo. De esta forma, es posible encapsular las moléculas que causan mal olor a raíz del incendio. Nano Nex dispone de generadores industriales de ozono que no producen residuos tóxicos en el ambiente y permiten desodorizar la escuela. La composición química del ozono (O3) es bien similar a la del oxígeno (O2) que respiramos.
Adiós al hollín en el colegio: métodos de limpieza
Por último, destacamos los métodos de limpieza que garantizan devolver el colegio a su estado original lo antes posible. Nano Nex menciona:
- Chorro de arena. Resulta muy adecuado para quitar el óxido de las superficies metálicas, puesto que, a la vez que limpia verjas, taquillas de metal, el exterior de las tuberías…, también lija y suaviza la superficie.
- Hielo seco, especialmente útil en las cocinas escolares y en los comedores de colegios. En estas estancias, se necesita una limpieza que elimine el hollín cuanto antes. Además, el hielo seco es capaz de quitar el moho acumulado durante años. De esta forma, se suprime el riesgo de intoxicación alimentaria.
- Limpieza con láser, muy adecuada para pupitres y otras superficies de madera y materiales rígidos: puertas de acceso a las aulas, pizarras, paredes, techos, muros de ladrillo… La limpieza instantánea con hielo seco no mancha, no daña la superficie y no requiere ningún proceso posterior de secado.