El sábado era el cumpleaños de Madelaine, así que, además de disfrutarlo con ella, he visto como lo celebran….
A las doce de la noche brindamos con champán y vinieron algunos vecinos a felicitarla. Luego, durante el día, hemos comido poco para tener hueco para la cena, la gran celebración… A la una y media han venido a su casa sus abuelos y sus primos para cantarle el cumpleaños feliz y comerse un trocito de tarta…y entonces me he dado cuenta de que aquí no soplan velas!!!
Ya arregladitas, a las cinco, fuimos a cenar a un restaurante y pude probar comida típica alemana, estaba todo buenísimo, mereció la pena guardar hueco!!
Hoy domingo hemos ido a visitar la ciudad de Speyer. Es una ciudad muy bonita.
Hemos visto el ayuntamiento, las casas típicas, un árbol que es típico de la región y muchas más cosas. Hemos entrado en la «Speyerer Dom» ( Catedral de Espira ), que es patrimonio de la humanidad de la UNESCO.
A la vuelta, hemos pasado por la panadería para comprar unos Bretzel, un dulce típico de Alemania que me ha encantado. Es un buen recuerdo de la ciudad!! 😉