Hoy 25 de noviembre de 2019, una vez más estamos aquí, porque ante la violencia que sufren y han sufrido muchas mujeres no queremos resignarnos.

Una violencia que no respeta fronteras, culturas, o niveles económicos, que es presente en el hogar, en el trabajo, en la calle y que supone una grave violación de los Derechos Humanos. Es en definitiva, una injusticia, que impide que la sociedad avance en el camino de la igualdad y el bienestar común que todas y todos queremos.

Según datos del Gobierno, un 4% de las mujeres españolas sufre violencia física habitual y hasta un 15% la han padecido en algún momento de su vida. En lo que va de año, 51 mujeres asesinadas, que dejan 43 huérfanos, y más de 80.000 denuncias son datos que deben avergonzarnos como sociedad, son actos que descalifican a qun los realiza y también a quien los tolera, es un TERRORISMO DE GÉNERO que no podemos permitir que nada, ni nadie, pongan en cuestión y mucho menos nos quieran revertir en nuestra justa y vital reivindicación.

Como sociedad debemos impedir los intentos de justificar, minimizar, banalizar u ocultar la violencia de género, debemos denunciar cualquier tipo de maltrato hacia las mujeres y arrinconar a los agresores y mucho menos debemos permitir que una lucha tan justa, igualitaria y necesaria sea tergiversada y manipulada con datos y realidades falsas del propio patriarcado que la genera.

Las mujeres son las víctimas y los números y la realidad así lo demuestran y por ello toda la sociedad tiene la obligación democrática de gritar alto y fuerte ¡NO MÁS VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES!

La educación en nuestro centro no es ni puede ser indiferente ante estos datos, y es por eso que este año volvemos a reivindicar con el firme propósito de que llegue el mensaje de rechazo a estas violencias, y de apoyo a sus víctimas. Nunca es tarde para dar el primer paso.

Sin duda alguna, la administración es responsable de buscar soluciones, de poner a disposición de las mujeres los recursos, ayudas y el personal necesarios para atenderlas tanto a ellas como a sus hijos e hijas menores. Menores que actualmente están reconocidos por la ley como víctimas directas y a las que debemos una atención global y completa para responder a sus necesidades y ofrecerles asistencia especializada, pero también debemos como parte de la ciudadanía, cuestionar los mensajes de conformismo, paciencia, pasividad, aceptación e impunidad del agresor frases como Mejor me callo, todo no puede ser bonito, tópicos y creencias como con la cuchara que coges, con esa comes , El que bien te quiere te hará sufrir. o los que se pelean se desean son algunas de las frases que hemos escuchado en varias generaciones, que se usan para justificar el machismo y que conllevan a un abandono de capacidades y de toma de decisión de la mujer que pone su destino, su integridad y su vida en manos de su agresor. Frases que hemos querido que formen parte de nuestra campaña contra las violencias machistas.

La comunidad educativa del IES Franscisco Rodríguez Marín de Osuna nos comprometemos a:

Invitar a la ciudadanía a manifestarse y denunciar cualquier expresión de violencia, generando actitudes de rechazo social hacia la violencia contra las mujeres, un fenómeno que no se limita a una edad, a una clase social, o a un determinado nivel de formación. Tampoco a una cultura, religión o territorio específico. Una terrible realidad que nos afecta a todos y a todas ante la que no podemos tener una actitud pasiva.

Apostar y apoyar las iniciativas orientadas a la NO RESIGNACIÓN ya que NUNCA ES TARDE para dar el paso, para solicitar ayuda, cuestionando los mensajes de conformismo, paciencia, pasividad, aceptación e impunidad del agresor.

Alzar la voz contra los agresores, atender y apoyar a las víctimas; mujeres y menores que a diario viven esta violencia. Tenemos que transmitir a las mujeres, seguridad y confianza en las instituciones, para que acudan a los recursos especializados existentes.

No dar un paso atrás en la implementación de las poticas de igualdad, luchando de esta forma contra la persistencia y la reproducción de desigualdades, promoviendo una sociedad más justa e igualitaria.

Osuna 25 de noviembre de 2019