Nadie sol@ – Acompañamiento en el recreo
Los recreos no son solo un momento de descanso sino también son una oportunidad para fortalecer el sentido de pertenencia y garantizar que nadie se quede al margen. Por ello, en el marco del programa Escuela Espacio de Paz, hemos implementado una iniciativa liderada por el alumnado ayudante, que tiene como objetivo promover la inclusión y evitar que ningún compañero pase el recreo en soledad.
El alumnado ayudante asume un rol activo durante los recreos. Su labor consiste en:
- Identificar a aquellos alumnos que puedan estar aislados o sin compañía durante el tiempo de descanso.
- Acercarse a ellos con naturalidad, iniciar conversaciones y, cuando sea posible, invitarles a unirse a juegos o grupos de compañeros.
- Ser un modelo de empatía, respeto y solidaridad para el resto de la comunidad educativa.
Una red de apoyo para todos
La presencia del alumnado ayudante no solo beneficia a quienes pueden sentirse solos, sino que también crea un ambiente más amable y acogedor en el centro. Esta iniciativa fomenta el desarrollo de habilidades como la empatía, la escucha activa y la responsabilidad en quienes forman parte del programa, contribuyendo al desarrollo integral de todos los implicados.
Un recreo, mil posibilidades
Gracias a esta iniciativa, los recreos se han convertido en un espacio donde todos y todas tienen un lugar. Las relaciones entre los estudiantes se han fortalecido, y el clima escolar ha mejorado significativamente. Más que nunca, los recreos son un tiempo para compartir, reír y crear vínculos que perduran más allá del tiempo de descanso.
En nuestra centro
, cada recreo es una oportunidad para construir paz, inclusión y comunidad. Y todo esto es posible gracias al compromiso del alumnado ayudante, que con pequeños gestos logra grandes cambios.