Luke Holland era un chico tímido y callado. Siempre iba a las gradas de su instituto a fumar. Era un chico de cabello rubio y ojos azules. Desde los diez años estaba enamorado de una chica llamada Hasley Weigrel, pero ella nunca le había hecho caso. Ella era una chica a la cual le encantaba conocer a gente nueva. Era simpática y social. Siempre iba con la camiseta manchada de pasta de dientes.
Un día ella había llegado tarde a clase, así que el profesor de Literatura le echó de clase.
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