Los procesos de soldadura implican una serie de riesgos diversa naturaleza:

  • Relacionados con las energías utilizadas:
    – Energía eléctrica (electrocución, quemaduras, etc.).
    – Llamas (quemaduras, incendios, etc.).
    – Manejo de gases (explosión, incendios, quemaduras, etc.).
  • Relacionados con el proceso en sí:
    – Generación de radiaciones no ionizantes (perjudiciales para los ojos y la piel).
    – Generación de gases y humos tóxicos (su composición dependerá del electrodo, los metales a soldar, la temperatura, etc.).
  • Relacionados con operaciones complementarias como amolado, cepillado,
    desbarbado, etc.
  • Relacionados con las condiciones en las que se desarrolla el trabajo:
    – En lugares elevados.
    – En recintos cerrados o espacios confinados.

En el siguiente vídeo te mostramos cuáles son los principales elementos que conforman el Equipo de Protección Individual de un soldador/a.