La palabra «impresionante» tiene mucho que ver con Goya. Sin duda, su trabajo ha dejado huella y su influencia perdura en el anime o en la filmografía de directores como Guillermo del Toro. Además fue un pionero de la impresión litográfica, siendo uno de los primeros artistas españoles en usar esa técnica.
Si te interesa el Goya impresor, en «Goya: obra gráfica completa» puedes disfrutar de su extensa e interesante obra, pero hoy no vamos a hablar del contenido del libro, sino de su cubierta. En concreto del tipo empleado en el título.
Se trata del célebre Herculanum de Adrian Frutiger, quien transformó en tipografía digital la hermosa cursiva romana de un papiro encontrado en Herculano, la ciudad hermana de Pompeya, que también fue sepultada por el Vesubio en el año 79.

Herculanum tiene bastante éxito entre quienes buscan un tipo de letra caligráfico bien dibujado, pero expresivo y rotundo. Sin embargo, hay que entender que para exprimir al máximo su potencial suele requerir un cuidadoso tratamiento.
Al teclear la palabra «Goya» con Herculanum, tal y como se ha hecho en la cubierta del libro, nos encontramos con varios problemas:
- El espaciado es excesivo para ser un titular a tamaño grande, ya que el tipo imita la prosa del texto original.
- El espaciado es irregular. La «G» y la «A» parecen separarse, mientras que la «O» y la «Y» se acercan demasiado.
- La «Y» se desalinea de las demás y parece descolgarse del renglón.
- De las dos versiones de «Y» que ofrece el tipo, se ha elegido la «Y» ancha, que al colocarse tan abajo separa el bloque de la palabra, leyéndose «GO y A».

Con algunos retoques, incluido un ligero alargamiento del fuste de la «Y», se puede recuperar la composición natural de la palabra. Además se potencia la fuerza expresiva de la «Y», que puede incluso sugerir los brazos abiertos de Los Fusilamientos del viejo, pero siempre revolucionario, Francisco José de Goya y Lucientes.
(Gracias a José Alfonso Mellado por el préstamo del libro)
Maraia, eres impresionante.