El primer paso para mejorar nuestro rendimiento académico y ritmo de trabajo es la organización temporal de nuestras actividades.
En clase se ha repartido una ficha (ver imagen inferior) donde se organiza el tiempo diario.
Durante la mañana, de 9:00 a 14:00, se organiza el tiempo en áreas.
En cambio, en la tarde, cada alumno/a debe anotar el tiempo destinado al almuerzo y a las actividades de ocio que realizan a diario. Este tiempo debe cumplirse diariamente, por lo que cada niño/a ha debido reflexionar en la distribución del tiempo que realiza. También es necesario añadir una hora de estudio diario, donde deben repasar las actividades, contenido y experiencias educativas que han tenido lugar en el aula en las distintas áreas.
⚠️¡Recuerda!
Para tener éxito educativo hay que adquirir un buen hábito de trabajo y estudio diario.