Cuadro general de mando y protección (CGMP)
También conocido como cuadro eléctrico, es el primer elemento de la instalación que nos encontramos dentro de cualquier vivienda. Este dispositivo debe estar precintado y de él parten todos los circuitos que llevan corriente a los distintos puntos. Sus funciones son el control de la instalación eléctrica de la vivienda y la protección de las personas y de los aparatos conectados a la red.
El cuadro de mando y protección está formado por distintos interruptores:
-
Interruptor de control de potencia (ICP). Es el primer interruptor del cuadro eléctrico y se encarga de cortar el suministro en el caso de que en el interior de la vivienda haya una demanda de potencia mayor que la que se ha contratado con la compañía eléctrica suministradora.
-
Interruptor general automático (IGA). Protege la instalación de sobrecargas y cortocircuitos. Se encarga de que no se supere el máximo de potencia que soporta la instalación, que no es lo mismo que la potencia que se tiene contratada (dicho de otra forma: si se tuviera contratada una potencia mayor que la que soporta la instalación, nunca llegaría a usarse el ICP porque el IGA limitaría antes la corriente).
-
Interruptor diferencial (ID). Protege a las personas de contactos indirectos, es decir, de fugas de corriente por fallo de aislamiento en los electrodomésticos, evitando electrocuciones cuando se toca un aparato que tenga un cable pelado o mal colocado. Si se pone en funcionamiento, es porque hay un electrodoméstico con un fallo o se ha producido una fuga de corriente hacia tierra. Su funcionamiento es el siguiente: se compara si la intensidad que entra en el circuito es igual a la que sale; en caso de derivación, la intensidad entrante y la saliente no son iguales y se activa el electroimán, que abre el circuito. Tiene un botón de prueba que permite comprobar el correcto funcionamiento del equipo.
- Protegen individualmente los circuitos interiores de sobrecargas y cortocircuitos. Son también útiles porque dan la opción de desconectar una parte de la instalación sin tener que interrumpir todo el suministro. Estos interruptores se llaman también magnetotér-micos porque están formados por un dispositivo magnético y uno térmico conectados en serie (el ICP y el IGA también son interruptores magnetotérmicos). Cuando se produce un cortocircuito, la gran cantidad de corriente que circula por el conductor crea un campo magnético en el electroimán que provoca que se desplace y abra el circuito magnético. Por otro lado, las sobrecargas provocan el calentamiento del circuito térmico, sobre cuyo metal se produce una deformación, y esto hace que se abra el contacto.