Yoga
El yoga es una disciplina, más que un deporte, porque no trata solo de cultivar el cuerpo, sino también la mente, y el alma. El yoga nació en la India y es una práctica de meditación muy común en el hinduismo.
Lo que conocemos como los tipos de yoga, son en realidad las nueve ramas del árbol del yoga. Todos estos tipos de yoga tienen un mismo objetivo común: la unión del cuerpo y la mente. Aunque es cierto que dependiendo del tipo de yoga que practiques puedes fortalecer unas zonas u otras de tu cuerpo, o ganas más flexibilidad o musculatura. Sea cuál sea el tipo de yoga que decidas hacer, trabajarás la meditación y la unión entre la conciencia individual y la conciencia universal.
Bhakti Yoga
Es un camino de adoración y devoción a Dios y/o un Gurú. Suele practicarse en sesiones de cánticos y cultiva la relación con lo divino. El Bhatki Yoga es ideal para las personas de naturaleza emocional y sensible.
Hatha Yoga
Este tipo de yoga está filosóficamente ligado al Tantra Yoga. El Hatha Yoga es uno de los más populares en occidente. Este tipo de yoga utiliza el cuerpo como herramienta para llegar a la exploración de uno mismo. El Hatha Yoga es conocido porque se practica a través de las populares Asanas (posturas de yoga), y tiene como objetivo purificar cuerpo y mente. Ideal para los que buscan conciliar buen estado físico y salud.
Japa Yoga | Yoga con mantras
Mantra es una palabra, sílaba o frase que se repite mentalmente, cantada o pronunciada en voz alta. El uso de los mantras tiene como finalidad centrar la mente y entrar en armonía con el cuerpo. El Japa Yoga es ideal para personas sensibles a vibraciones sonoras, que buscan retirarse de una existencia ruidosa.
Jnana Yoga
El Jnana Yoga se conoce también como el yoga del verdadero conocimiennto. Los que practican este tipo de yoga buscan la sabiduría a través de ellos mismos, mediante el debate y la razón. El Jnana Yoga es ideal para personas con mente racional y analítica, que disfrutan de la filosofía.
Karma Yoga
Es un camino desinteresado que entiende el yoga como una acción que se ofrece a Dios, sin esperar recompensas. El Karma Yoga es perfecto para las personas que desean servir a la humanidad.
Tantra Yoga
Es un error relacionar el Tantra yoga con una forma de sexo espiritualizado, porque en realidad el sexo es sólo una parte ínfima del yog atántrico. Trabaja en el ritual, la meditación y el misticismo. El hatha yoga es una de sus ramas.
Laya Yoga | Yoga Kundalini
El Laya Yoga se basa en prácticas que actúan sobre los chakras, o centros energéticos, y tiene como objetivo dominar la función de cada uno de ellos. Este tipo de yoga también se conoce como Yoga Kundalini. Este yoga es aconsejable para aquellos que practiquen con un maestro experimentado, ya que puede ser verdaderamente poderoso.
Las posturas de yoga, llamadas asanas, son ejercicios de yoga que unen el cuerpo con la mente. Patanjali, considerado el maestro de yoga, afirma que las posturas de yoga deben ser mantenidas hasta que se consiga la conexión con la esencia divina de la vida humana. Las asanas más conocidas son las que han popularizado la práctica del Hatha Yoga.
Para practicar las posturas de yoga es importante tener en cuenta tres factores:
La inmovilidad
La relajación
La duración
Las asanas no consisten en imitar una postura de yoga determinada, sino en conseguir el equilibrio y la concentración en ese punto, con una respiración adecuada.
Existen distintos tipos de yoga, y por tanto también distintas asanas:
-Loto
-El gato
-El niño
-El perro
-La rana
-La cobra
-La vela
-La silla
-El guerrero
-El pez
-La vaca
-Saludo al sol
BENEFICIOS INMEDIATOS DEL YOGA
Paz Interior
Los resultados más inmediatos de la práctica de Yoga y de la meditación tienen que ver con el cultivo de la paz interior y de la quietud. Son la base para que los otros beneficios del Yoga surtan un efecto real y auténtico. Debemos saber que la práctica de Yoga nos brinda esta vivencia y desarrolla en nosotros una verdadera actitud de ecuanimidad. Es fundamental para vivir una vida digna y feliz.
Desarrollo de la Conciencia
Este es el gran regalo que el Yoga nos ofrece: la conexión con el momento presente. Cuanto más practicamos, más conscientes nos hacemos de nuestro entorno y del mundo que nos rodea y sin duda, más conciencia generamos sobre nosotros mismos. Se abre el camino a una mejor concentración, coordinación, tiempo de reacción y memoria.
Acondicionamiento Cardiovascular
La práctica de Yoga contribuye a mejorar la cardíaca y pulmonar. Gracias a los vinyasa que presentan posturas enlazadas al ritmo de la respiración, se genera también la actividad aeróbica que el cuerpo necesita para el funcionamiento óptimo de un corazón sano.
Mejora de la circulación
El Yoga a través de las posturas y el movimiento, ayuda a mejorar la circulación de manera eficiente y ayuda a la oxigenación de las células del cuerpo.
Control del peso
Si bien la mayoría de los efectos del Yoga en la pérdida de peso es anecdótico o experimental, tanto los profesores de Yoga como los estudiantes encontramos que el Yoga ayuda a mantener el peso. Muchos profesores se especializan en programas de Yoga que ayudan a perder peso pero sería muy superfluo practicar Yoga por ese motivo. Nunca hay que olvidar que este beneficio es un regalo que la práctica de Yoga nos brinda mientras caminamos hacia el objetivo principal de conocernos a nosotros mismos.
Incremento de la fortaleza y la resistencia
En las posturas de Yoga participan todos los músculos del cuerpo como si se tratara de una orquesta que toca una melodía armoniosa. Por tanto, una práctica asidua de Yoga puede aumentar nuestra fuerza, literalmente, de pies a cabeza. Al mismo tiempo, la coordinación de la acción con la relajación, alivia la tensión muscular en todo el cuerpo al tiempo que incrementa la fortaleza.
Aumento de la Flexibilidad
El Yoga mejora la flexibilidad y la movilidad e incrementa el rango de movimiento. Con una práctica asidua, los músculos se van estirando con mayor facilidad y las articulaciones aumentan su elasticidad. Todo ello puede ofrecernos una mayor agilidad en la vida diaria y puede prevenir las dolencias que aparecen con la edad además de eliminar los efectos que producen en el cuerpo algunos de los oficios más comunes en nuestro días: permanecer sentados muchas horas delante del ordenador, conducir cada día y pasar sentados ante el volante mucho tiempo, trabajar de pié…
Alivio del dolor
La práctica de Yoga alivia el dolor. Los estudios han demostrado que la práctica de asana (posturas), relajación, meditación y su combinación, proporcionan un alivio considerable del dolor en las personas con enfermedades o dolencias de cualquier tipo. ¿Por qué? Porque en una clase de Yoga se aprende a escuchar, a relajar, a llevar intención y energía hacia las partes del cuerpo afectadas, a conocer las sensaciones y gestionarlas, a controlar y disolver los efectos del dolor y, en definitiva, a estar presentes con confianza y con una actitud de sana y positiva aceptación.
Reducción del estrés
Está bien demostrado que con la práctica de Yoga se pueden reducir los efectos físicos y mentales del estrés. El organismo contesta al estrés a través de una respuesta de lucha o huida que supone una combinación entre el sistema nervioso simpático y las vías de activación hormonal; se libera cortisol –la llamada hormona del estrés– a partir de las glándulas suprarrenales.
La práctica de Yoga que propone un proceso de escucha y que en sus planteamientos mira a desarrollar el respeto y la sensibilidad hacia el cuerpo y la mente, reduce los niveles de cortisol de manera casi inmediata. La mayoría de las clases de Yoga proponen este proceso.
La combinación de la acción y la relajación en la práctica de Yoga es primordial para vivir la experiencia de la eliminación del estrés; aprender a relajarse en la acción, incluso en la acción intensa, es la semilla que crea los recursos personales para responder al ritmo frenético de la vida con ecuanimidad y centramiento: sin estrés.
Bibliografía: https://yoga.guiafitness.com/