La necesidad de aprender una lengua extranjera en la actualidad es debida a la
importancia que ha adquirido en la sociedad y en la vida de la gente para acceder a
trabajos mejores o la posibilidad de viajar a países extranjeros, desarrollando la
capacidad de comunicarse con hablantes nativos.

                                                   
Es particularmente relevante el aprendizaje de la lengua inglesa puesto que es el
idioma más extendido en el mundo, siendo la principal lengua para la información y el
negocio, la lengua oficial de Internet y no podemos olvidar la influencia de su cultura, a
través de películas o canciones.

En nuestro caso, en Andalucía, la importancia de
aprender inglés se acentúa debido a la frecuente y alta presencia de turistas.
La importancia de la lengua extranjera inglesa en un nivel social y educativo es
nuestra justificación más visible para la enseñanza de este idioma en las escuelas de
Educación Infantil y Educación Primaria, junto con la ventaja de que en esas edades
es cuando la flexibilidad lingüística tiene lugar.
El hecho de que se comienza a enseñar la lengua extranjera en estas edades tan
tempranas como es el caso de Educación Infantil se debe a que los niños y niñas son
como esponjas, como bien dice Wallon, absorben todo lo que les rodea, y que mejor
momento para empezar con el aprendizaje de una segunda lengua, y en especial, con
la lengua inglesa que tan importante es hoy en día.

El objetivo principal del segundo ciclo de educación infantil debe ser el de despertar y
continuar con el interés por el idioma extranjero y que los niños y niñas disfruten
usando una segunda lengua de forma comunicativa.

Es de suma importancia el hecho de trabajar de manera integrada todos los tópicos
que los alumnos y alumnas trabajan en su primera lengua, favoreciendo así la relación
entre las áreas. Puede ser por ejemplo, el trabajo de la expresión artística a través del
área de inglés mediante la elaboración de murales, dibujos, tarjetas, manualidades
diversas…, especialmente para la celebración de las festividades, elevándose el grado
de dificultad acorde con las edades y capacidades del alumnado.
Para el correcto desarrollo en las sesiones de lengua extranjera, como en cualquier
nivel de enseñanza, es primordial la previa organización de la sesión, puesto que la
improvisación puede resultar caótica con niños y niñas de estas cortas edades. Es
necesario estructurar la sesión en diversos momentos, pues como ya sabemos, el
alumnado de esta edad tiene cortos períodos de atención y necesitan el cambio
constante de actividad para que ésta no se pierda.
Por esta razón, se puede comenzar la sesión con una asamblea (circle time), similar a
la que realizan en su lengua materna, sentados en la alfombra, y mediante la lengua
inglesa y el uso de gestos e imágenes podemos comenzar presentándoles la sesión
del día y la temática a tratar. Durante esta asamblea en lengua extranjera, es el
momento de saludar en la segunda lengua, contestar a una serie de rutinas como
pueden ser el tiempo atmosférico o una canción acerca de los días de la semana
mientras van tocando palmadas y contestando yes / no.
Tras esta asamblea en la segunda lengua, se puede realizar algún juego con la clase
(play time), como puede ser mediante el uso de flashcards mientras siguen sentados o
en los que los alumnos y alumnas tengan que moverse por la clase, como puede ser
señalar un objeto de la clase del color que se dice en la segunda lengua.
Para finalizar la sesión, llega el momento del trabajo individual de alguna actividad en
la que trabajen en su mesa (table time). Y, por último, guardan su trabajo al ritmo de
alguna canción y nos despedimos con otra canción en lengua inglesa.
Con respecto a las destrezas lingüísticas básicas, en estos niveles iniciales se trabajan
las destrezas orales, tales como Listening y Speaking, ocupando la destreza receptiva
oral la mayor parte del tiempo, debido a que al igual en su lengua materna, primero
aprende a escuchar y a hablar antes que a escribir y a leer. Por dicha razón, es muy
importante el uso de la lengua inglesa como vehículo de comunicación en clase, sin
olvidar el uso de gestos y soportes visuales.

De igual modo que al alumnado de esta edad le encanta escuchar historias mientras miran las imágenes de un cuento, suele ser un recurso muy atractivo el uso de “Big Story Books”, debido a su gran tamaño y
colorido hace que los alumnos y alumnas disfruten de forma relajada escuchando la
lengua inglesa y desarrollando interés por la audición de cuentos en una segunda
lengua, puesto que a pesar de que no entiendan todo el contenido, lo cual es obvio,
son capaces de seguir la trama de la historia, la cual tiene una duración lo
necesariamente breve para no aburrirse y facilita su comprensión mediante sus
imágenes.
Un aspecto esencial es la creación de un ambiente anglosajón en el aula, siendo
bastante interesante la dedicación de una parte del aula al idioma extranjero mediante
un rincón de inglés, “the english corner”. A través de este rincón el alumnado tendrá
presente en todo momento del día y durante sus sesiones en lengua materna el idioma
inglés. En este rincón se podrán colgar tanto trabajos realizados por el alumnado,
tales como dibujos sobre festividades celebradas, como motivos relacionados con los
personajes de los cuentos (marionetas plastificadas), imágenes sobre el tiempo
atmosférico para hacer referencia en el momento de la asamblea, así como colgantes
que sirven para designar al ayudante del día para repartir el material o para la
realización de cualquier otra tarea (helpers).
El uso de flashcards es el recurso estrella en la enseñanza de un idioma, puesto que
facilita el aprendizaje de vocabulario y ayudan al apoyo y a la comprensión mediante
imágenes. Una forma interesante de sacarle partido a este recurso, es mediante la
realización de juegos. Un ejemplo sería el poner las flashcards de un tema mirando
hacía la pared o en el filo de la pizarra; vamos nombrando cada palabra y cada vez un
alumno o alumna elige una flashcard le damos la vuelta y si ha acertado se deja para
que se vea la imagen, pero si por el contrario no ha acertado se vuelve a poner al
revés. El alumnado tendrá que memorizar la posición que ocupa cada una de ellas.
Otra actividad, consiste en darle a los niños y niñas unas mini-flashcards y conforme
vamos nombrando ellos/as van mostrándolas, de este modo se aprende y se afianza
el vocabulario aprendido.
Por otro lado, el uso de wallcharts o pósters, facilitan la comprensión y la práctica de lo
que se está aprendiendo acerca del nuevo idioma, así como para el repaso de otros
conocimientos previamente adquiridos. A través del uso de pósters, podemos
establecer una serie de rutinas tales como el tiempo atmosférico, los días de la
semana, la celebración del cumpleaños de cualquier compañero, los números, los
colores, entre otras.
El uso de pegatinas puede ser un gran recurso material para usar con niños de estas
edades, ya que es un material que les gusta y del cual podemos sacar partido, así
como para usarlos a modo de premios, ya sea por su comportamiento o por el trabajo
realizado.
Otro gran recurso para la enseñanza de la lengua inglesa y que es indispensable para
el aprendizaje en estas edades, es el uso de canciones, ya sean canciones típicas
como inventadas por nosotros mismos, que requieran movimiento o no. Una actividad
que resulta bastante motivante para los alumnos/as, una vez aprendida la letra de la
canción, es ir parando la música y que ellos/as sigan cantando.

Otro tipo de actividad, es que todos los alumnos/as bailen y canten mientras suena la canción y que se
queden quietos y en silencio cuando la música deje de sonar. De este modo, están
jugando mientras aprenden una canción en la lengua extranjera, y por lo tanto,
pronunciación y audición.

Una actividad para el alumnado de 4 y especialmente de 5 años, que es de su agrado,
es la realización de un libro con las imágenes del vocabulario aprendido, en el cual
tengan que rellenar sus datos en la portada, tales como nombre o clase.

Una forma atractiva para presentar el nuevo vocabulario y captar la atención del
alumnado es a través de “realia”. El hecho de llevar objetos reales a clase, fruta,
prendas de vestir, etc, ayuda a una mejor comprensión e interés por parte de nuestros
alumnos/as.
Una actividad que resulta bastante interesante para el alumnado y nos permite
disponer de su atención, son las actividades de respuesta física, Total Physical
Response mencionadas anteriormente. Aquí, el alumnado tendrá que ir haciendo
movimientos o tocándose partes del cuerpo, entre otras acciones. De este modo
podemos comprobar el nivel de comprensión de nuestro alumnado, a la vez que
aprenden y se divierten. Un juego divertido suele ser el de “Simon says”, pudiendo
variar y adaptarlo a “Monkey says” or “The teacher says”.
Un recurso muy motivante y atrayente para el alumnado es el visionado de videos de
dibujos animados en lengua inglesa, puesto que el colorido y el formato les envuelve en la trama de la historia, dando la posibilidad de que escuchen el idioma inglés
durante todo el tiempo que dura la proyección, teniendo muy en cuenta que la
duración del vídeo no puede alargarse más de sus posibilidades y capacidades de
tiempo de atención.
No podemos olvidar la importancia de introducir las Nuevas Tecnologías de la
Información y de la Comunicación en la enseñanza de la lengua extranjera inglesa en
Educación Infantil. A pesar de las cortas edades de nuestro alumnado, ya están
familiarizados con las nuevas tecnologías, como es el caso de los ordenadores. Para
hacer uso de este recurso en el aula, podríamos utilizar portátiles para ponerles vídeos
con canciones o cuentos en versión original a través de Internet. Otra forma sería,
cuando ya son un poco más independientes, 4 o 5 años, el usar dos o tres portátiles
en clase para llevar a cabo juegos interactivos por grupos de alumnos, mientras el
resto realiza otra tarea. Puede convertirse en un elemento bastante motivador y
enriquecedor para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En general, resulta imprescindible que los niños y niñas de estas edades manipulen
objetos y materiales para la realización de actividades y para el aprendizaje del nuevo
idioma, haciendo uso de una gran variedad de recursos para presentarle esta segunda
lengua y, sobre todo, acercarles al nuevo idioma de una manera divertida, lúdica y
motivante. Este último aspecto sobre la motivación es imprescindible para la
enseñanza de cualquier área, y en especial, para el aprendizaje de un idioma.
Por último, sería interesante destacar que para la enseñanza de un idioma en el
segundo ciclo de Educación Infantil, se hace imprescindible el uso de una serie de
estrategias y técnicas a desarrollar en el aula, puesto que para enseñar al alumnado
de esta etapa, se requieren otras destrezas, técnicas, metodología y habilidades
diferentes a las requeridas en la Educación Primaria.