Nuestra Historia

El actual colegio Ribera de Ciudadeja, anteriormente conocido como San José de Calasanz, ha sido desde sus inicios un referente educativo en la localidad. Las obras del edificio comenzaron durante el curso 1973-1974 y, tras varios años de construcción, el centro abrió sus puertas en septiembre de 1976. En aquel momento contaba con 13 aulas y una plantilla de 13 docentes, distribuidos en dos líneas educativas, con un horario de 10:00 a 13:00 por la mañana y de 15:00 a 17:00 por la tarde. El colegio acogía a 356 alumnos de entre 6 y 14 años, abarcando los niveles de la antigua Educación General Básica (EGB), desde 1º hasta 8º curso.

El edificio también albergaba la Guardería municipal, destinada al ciclo de Infantil (niños de 3 a 5 años), lo que permitía una continuidad educativa dentro del mismo entorno escolar.

Uno de los grandes avances del centro fue la incorporación del comedor escolar, que comenzó a funcionar en 1978 con una capacidad para 180 alumnos. A pesar de las reticencias iniciales por parte de las familias, con el tiempo se convirtió en un servicio fundamental para la conciliación y el bienestar del alumnado.

El primer director del centro fue D. Manuel Muñoz García, quien dejó su cargo al ser destinado a otro centro, siendo sustituido por Dña. Simona Aparicio Sánchez.

En marzo de 1987, se solicitó por primera vez la incorporación de un especialista en Educación Especial, marcando un paso importante hacia la atención a la diversidad y la inclusión.

Desde sus comienzos, el colegio destacaba por su carácter moderno e innovador. Contaba con instalaciones poco comunes en la época, como un laboratorio de ciencias, un laboratorio de idiomas, un aula de pretecnología y un gimnasio, lo que lo convertía en un espacio privilegiado para el aprendizaje y el desarrollo integral del alumnado.

Hoy, el colegio Ribera de Ciudadeja sigue siendo un pilar en la comunidad, fiel a sus orígenes pero siempre mirando al futuro con vocación educativa y espíritu renovador.