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Hoy ha sido un día muy especial en el huerto escolar. Nuestro alumnado ha participado en una tarea fundamental para el buen crecimiento de nuestras lechugas: ¡las hemos atado con gomas!
Con mucho cuidado y entusiasmo, los niños y niñas han aprendido, con la explicación de nuestro «maestro» del huerto Cato Baena, a sujetar las hojas de las lechugas para que crezcan más cerradas, ayudando así a que se conserven mejor y mantengan su frescura. Ha sido una actividad sencilla, pero muy significativa, que les ha permitido conectar una vez más con el proceso de cultivo y cuidado de los alimentos.
Además de aprender sobre las plantas, esta experiencia ha fomentado valores como el trabajo en equipo, el respeto por la naturaleza y la responsabilidad compartida.
Nuestro huerto escolar sigue siendo un espacio vivo de aprendizaje, donde cada pequeña acción cuenta… ¡y hoy nuestras lechugas están un paso más cerca de llegar a la mesa!
