EXCURSIÓN A COSTACABANA
El pasado miércoles 14 de junio un grupo de alumnos del Centro de Inserción Social Manuel Pérez Ortega, salimos de excursión a las playas de Costacabana en el municipio de Almería. Fuimos caminando desde el mismo Centro hasta la playa. Antes de la partida, nos aplicamos crema solar y nos pusimos gafas y gorra para protegernos de los rayos y la luz del sol.
Pasamos por el barrio de El Puche y por el estadio de fútbol Power Horse, hasta llegar al parque urbano del Andarax. Allí paramos en un estanque para ver los animales (tortugas, cotorras, patos e incluso una garza real). Atravesamos el parque hasta la Centro Zoosanitario de Almería y desde allí cruzamos el río Andarax por el puente de su desembocadura. Una vez en el otro margen del río, pudimos observar la 
planta desaladora que suministra una pequeña parte del agua que llega a nuestras casas y la depuradora de aguas residuales. Llegamos a la Universidad de Almería (UAL) caminando por el Paseo Marítimo de Ribera, donde desayunamos en una de sus cafeterías. Nuestro último trayecto paseando nos llevó hasta Costacabana, donde nos protegimos del sol en la carpa reservada para personas con movilidad reducida, ya que se encontraba vacía. Antes de bañarnos, nos aplicamos de nuevo un poco de protector solar. El agua estaba turbia y fresca por el viento de poniente del día anterior. Tras el baño hicimos unos estiramientos con el maestro Fernando. A la hora del almuerzo tomamos, en un bar frente a la playa, unos refrescos con unas apetitosas tapas: arroz, calamares, carne al ajillo, ensaladilla rusa, patatas a lo pobre con huevo,… ¡Todo estaba buenísimo!
Tras almorzar, fuimos caminando hasta la parada de la línea 20 del autobús urbano que se encuentra frente al IES Portocarrero. Tras un corto trayecto en un autobús repleto de gente, nos apeamos en El Ingenio, entre Los Molinos y El Puche. Antes de volver al CIS, disfrutamos de unos deliciosos helados que nos ayudaron a hacer frente al calor y recuperar parte de la energía empleada para realizar la larga caminata de nuestra excursión. Regresamos exhaustos a las 17.45, aproximadamente anduvimos unos 13 kilómetros. Fue una actividad muy grata y completa, lo que se reflejaba en la cara de todos, llenas de felicidad y tranquilidad. La excursión nos permitió desconectar de la rutina de todos los días, hacer bastante ejercicio físico, estar en contacto con la naturaleza y tener una buena armonía entre todos los compañeros.
El próximo curso el maestro debería organizar muchas excursiones como esta, en las que podamos adquirir hábitos que hagan nuestra vida más saludable.
