Comentario de dos textos históricos tratados en clase de 1º de Bachillerato. Espero que os sirvan a modo de ejemplo. Incluyo el análisis del contexto histórico de ambos textos al final del todo, ya que son textos del mismo momento que tratan aspectos semejantes desde perspectivas distintas. 😉
“Cercamiento. Son tales y tantos los beneficios y ventajas que se podrían derivar de un total cercamiento de las common lands (tierras comunales) que me es imposible describirlos o enumerarlos. Daría la oportunidad de separar las tierras áridas de las húmedas, la de desecar estas últimas, la de abonar las zonas agotadas, y todo ello podría producir inestimables resultados; el nuevo ordenamiento permitiría, con la ayuda de hábiles ganaderos, la cría de ovinos y bovinos de raza mucho mejor que las que se ven habitualmente en estas zonas, en donde hay animales miserables y medio muertos de hambre. Teniendo al ganado en zonas cercadas se conseguiría mantener a un número mayor con la misma cantidad de alimento. Su costumbre de vagar y de moverse no sólo destruye la hierba con sus pisadas, sino que también los reduce a huesos y piel. Y ello en la actualidad hace necesaria la presencia de un pastor que los meta y los saque del establo. De otro lado, y mediante este sistema, el ganado podría rendir a la comunidad y a los individuos cien veces más de lo que los hacía hasta ahora, antes de los cercamientos. Por último y fundamental aspecto, se podría proteger al ganado de la peste, esa mortal enfermedad que hace terribles estragos en nuestros rebaños. Hay que añadir que ese abastecería mejor de carne de buey y de cordero a los mercados y que el precio de estos géneros se reduciría considerablemente.
Hay que señalar también que el sistema de las common lands nunca ha aportado nada a la solución del problema del empleo. Y que apenas se hiciera un cercamiento, la situación se transformaría positivamente, y una desolada tierra inculta se convertiría en la más risueña de las zonas. Actividades y trabajos de toda índole se desarrollarían en esos lugares. El que quisiera contribuir a esa empresa encontraría una gran cantidad de ocasiones de trabajo: excavar fosas y canales de desagüe, construir terraplenes y vallas, plantar setos y árboles; los herreros y demás artesanos del campo no tendrían que quedarse con los brazos cruzados pues habría mucho trabajo para ellos en la construcción de factorías y de sus respectivos anexos, y en la proyección y construcción de caminos, puentes, cercados, empalizadas, aperos agrícolas, etc. Pocos años después de haber llevado a buen término estos primeros y temporales esfuerzos, y cuando todo el conjunto estuviese organizado en un sistema agrícola regular, se podría alimentar y dar trabajo a una población notablemente aumentada.”
John Middleton. View of the agriculture of Middlesex. 1798.
“Los demandantes piden poder exponer a la Corte de justicia en base a los siguientes hechos:
Que con el pretexto de hacer mejorías en las tierras de propiedad de la citada parroquia se privará a los campesinos sin tierra y a todas las personas que tienen derechos sobre las common lands que se pretenden cercar, del indispensable privilegio del que actualmente gozan, es decir, de que sus bueyes, terneros y ovejas puedan pacer a lo largo y a o ancho de dichas tierras. Este privilegio no sólo les permite mantenerse a ellos y a sus familias en medio del invierno -cuando no lograrían, ni siquiera pagando en dinero contante, que los propietarios de otras tierras les dieran la mínima cantidad de leche o de suero para tales necesidades-, sino que también les permite entregar a los ganaderos partidas de animales jóvenes y delgados a un precio razonable, para luego engordarlos y venderlos en el mercado a un precio más moderado; y este sistema se considera como el más racional y eficaz para asegurar el abastecimiento público de géneros de primera necesidad a precios más bajos. Los demandantes consideran además que el resultado más desastroso de este cercamiento será la casi total despoblación de su ciudad, ahora llena de trabajadores orgullosos y fuertes que, al igual que los habitantes de otras parroquias «abiertas», son el vigor y la gloria de la nación, el sostén de su flota y de su ejército. Bajo el empuje de la necesidad y de la falta de trabajo, se verán obligados a emigrar en masa hacia las ciudades industriales, en donde la naturaleza misma del trabajo en el telar o en la fragua reduciría pronto su vigor, debilitaría a su descendencia y podría hacerles olvidar poco a poco ese principio fundamental de obediencia a las leyes de Dios y de su país que constituye el carácter peculiar de esos sencillos y fieros campesinos que es fácil encontrar en las zonas de los open fields y de los que en gran medida dependen el orden y la tranquilidad del Estado. Según los demandantes, éstos son algunos de los daños que se podrán derivar de las previstas medidas que les afectarán como individuos, pero que tendrán consecuencias en toda la comunidad. Ya se han comprobado estos daños en muchos otros casos de cercamientos, y ellos opinan que presentando el problema al Parlamento (que constitucionalmente es protector y patrono de los pobres) sus derechos no podrán dejar de ser tutelados frente a la ley en discusión.
Petición de pequeños propietarios de tierras y personas con derechos de servidumbre activa sobre las common land. En Raunds, Northamptonshire. Commons Journal, del 19 de julio de 1797.
El primer texto presenta una naturaleza económica, ya que defiende una reforma de tipo económico, más concretamente, de carácter agrícola, los llamados «cercamientos». El autor es John Middleton, especialista inglés de agricultura de la época, y está escrito a finales del siglo XVIII.
El texto defiende de manera enérgica las posibles ventajas que la generalización de los cercamientos o enclosures tendría para el conjunto de la economía inglesa de la época.
Como idea fundamental debemos señalar la defensa y generalización de estos enclosures o cercamientos, que permitían el vallado de las tierras dedicadas a la práctica agrícola o ganadera, pero causarían la desaparición o privatización de las common lands o tierras comunales, tierras pertenecientes al conjunto de pequeños campesinos y que eran explotadas de forma colectiva. Los citados cercamientos, generalizados en Inglaterra entre los siglos XVII y XIX, están relacionados con la introducción de nuevas prácticas agrícolas, como la rotación de cultivos compleja o sistema Norfolk, que permitía una mayor fertilización de la tierra y una producción ganadera más estable y abundante, o la mejora de los campos (desecar tierras húmedas, por ejemplo), así como un desarrollo de la agricultura de mercado, cuyo producto estaba destinado mayoritariamente a la venta en los mercados interiores de Inglaterra, antes que a la subsistencia. Según el autor, firme defensor de estas reformas, los cercamientos, supondrían una enorme mejora de la actividad agrícola al permitir «separar las tierras áridas de las húmedas», «abonar zonas agotadas», aumentar la producción de ganado, lo que permitiría hacer descender el precio de la carne y alimentar mejor al conjunto de ingleses, y controlar mejor las plagas y pestes de ovejas, bueyes y vacas. En definitiva, mejoras en todos los niveles, que permitirían «alimentar y dar trabajo a una población notablemente aumentada». Por otro lado, el autor considera que las tierras comunales no suponen ningún beneficio para el conjunto de los campesinos («nunca han aportado nada a la solución del problema del empleo»), y su desaparición no supondría prejuicio alguno para éstos, sino todo lo contrario («una desolada tierra inculta se convertiría en la más risueña de las zonas»).
El segundo texto, por otro lado es un documento de carácter político, aunque con un trasfondo económico. Se clasifica como «político» pues se trata de una petición presentada por los pequeños campesinos de una zona inglesa al Parlamento en 1797. En esa petición, los pequeños propietarios solicitan que los cercamientos agrarios no se lleven a cabo en su área de origen, pues consideran que sólo producirá efectos negativos en la población campesina.
La idea principal del texto es la negativa del conjunto de campesinos a la introducción de los enclosures y la consiguiente desaparición de las tierras comunales. Los campesinos exponen que estas tierras comunales son las que les «permiten mantenerse a ellos y a sus familias en medio del invierno», cuando el trabajo agrícola escasea y pueden hacer uso de esta tierra común para alimentar al ganado, que en muchos casos, compran a los ganaderos a «precios razonables» y venden en el mercado después de haber sido engordados o son directamente consumidos por las familias en momentos de necesidad. En el caso de que los cercamientos sigan llevándose a cabo, los campesinos, que ya conocen «estos daños en muchos otros casos», se verán abocados a la pobreza y deberán huir a la ciudad, cuya pujante industria necesita de mano de obra. Otra idea que podemos encontrar en el texto, es la opinión de los campesinos acerca de las condiciones de vida en el campo y en las ciudades de esta época. Para los campesinos, la vida en el campo, en concreto en las zonas de open fields, no afectadas por los cercamientos y con un gran número de pequeños propietarios, es la que permite la existencia de «trabajadores orgullosos y fuertes», que son «el vigor y la gloria de la nación», y presentan un carácter «sencillo y fiero», y, en definitiva, son «de los que en gran medida dependen el orden y la tranquilidad del Estado». Los trabajadores industriales en cambio, son vistos por los campesinos como debilitados y empobrecidos, debido a las duras condiciones de trabajo («la naturaleza misma del trabajo en el telar o en la fragua reduciría pronto su vigor, debilitaría su descendencia»); incluso son vistos como corrompidos y envilecidos por las pésimas condiciones de vida en las ciudades obreras («podría hacerles olvidar poco a poco ese principio fundamental de obediencia a las leyes de Dios»).
Finalmente, los campesinos considerarían sus reivindicaciones justas y razonables, buscando amparo en el Parlamento («que constitucionalmente es protector y patrono de los pobres»), y sus derechos tradicionales estarían por encima de las reformas o mejorías de las tierras . Su objetivo no es «revolucionario», sino más bien, conservador, es decir, pretenden «conservar su privilegio» frente a las reformas económicas que se vienen llevando a cabo en Inglaterra.
Como contexto histórico de ambos documentos debemos hacer referencia al proceso de Revolución Agraria llevado a cabo en Inglaterra entre los siglos XVII y XVIII, y a uno de sus elementos fundamentales, los cercamientos, que aparecen tratados en ambos textos desde puntos de vista y perspectivas diametralmente opuestos. El desarrollo de los cercamientos permitió una generalización de los latifundios en manos de grandes propietarios, provenientes de la aristocracia (gentry), la burguesía comercial o los campesinos enriquecidos (yeomen), así como una introducción de notables mejoras en la práctica agrícola. Estas mejoras (especialización de la producción, sistema complejo de rotación de cultivos, selección de especies, aumento del ganado y del abono, …) permitieron elevar progresivamente la producción y alimentar cada vez a más personas en Inglaterra, que conforme se va desarrollando esta Revolución Agrícola experimenta un proceso de Revolución demográfica, caracterizado por un descenso de la mortalidad (debido fundamentalmente a la disminución de las hambrunas y mortandades catastróficas, así como al aumento de la esperanza de vida media y al descenso de la mortalidad infantil) y un mantenimiento de la natalidad (algunos expertos apuntan la idea de que la natalidad incluso aumentó debido a la mayor precocidad en el matrimonio). A su vez, esta Revolución Agrícola está íntimamente ligada con el desarrollo de un mercado nacional en Inglaterra, gracias a la mayor demanda, a la mejora de los transportes (canales fluviales y caminos) y a la generalización de una economía monetaria. Estos elementos permiten explicar el enorme desarrollo de Inglaterra previamente a la Revolución Industrial, y explican por qué fue el primer país en sustituir la producción artesanal por una producción industrial masiva con máquinas, fábricas y fuentes de energía de origen fósil.
El proceso de cercamientos benefició notablemente al grupo de grandes propietarios agrícolas, que así pudieron introducir sus mejoras en las tierras comunales y cercar las tierras para evitar el movimiento del ganado, y a su vez, perjudicó a los pequeños campesinos que se vieron notablemente empobrecidos y en muchos casos, tuvieron que malvender sus tierras para pagar sus deudas, beneficiando así a estos grandes propietarios, y se convirtieron en jornaleros u obreros industriales de las grandes ciudades en expansión, con peores condiciones de vida que las que tenían en épocas anteriores.
Podemos decir, a modo de conclusión, que el «progreso» no afectó a todos los ingleses de la misma manera.