Durante la infancia acostumbran a apetecer ciertos alimentos poco recomendables. Es por este motivo que conviene incidir ya desde temprana edad en los hábitos que permitirán a los peques llevar una vida saludable sin contratiempos como caries, dolores estomacales e incluso otras afecciones más graves.
Con tal de evitar este tipo de adversidades los profesores de Andalucía no dudan en enseñarles a los estudiantes una serie de factores con los que mejorar la dieta. Básicamente son pequeñas cosas que adquieren una gran trascendencia sobre todo a largo plazo.
Incrementar las cantidades de determinados alimentos
Por desgracia algunos productos alimenticios, a pesar de ser extremadamente beneficiosos, no son consumidos por los estudiantes pequeños con demasiada regularidad. Un claro ejemplo es el de los frutos secos.
Elementos como los pistachos y las avellanas pueden ayudar a tener un estado cardiovascular óptimo a todos los niveles. Algo similar sucede con las nueces, desde las de Macadamia hasta la conocida como nuez pecana.
Otro buen ejemplo de alimento que debería ingerirse con mayor frecuencia es la fruta. Cinco piezas al día es la recomendación que suelen realizar los profesionales de la educación. Precisamente hablando de la fruta llega el momento de sacar a colación otro consejo fundamental.
Reducir los azúcares artificiales
Algunos padres prácticamente no dan fruta a sus hijos para que no ingieran azúcar. Se trata de un error, puesto que dicho ingrediente naturalmente presente en productos como el plátano y la manzana no es perjudicial. El que sí ha de ser evitado a toda costa es el de carácter artificial.
Desafortunadamente hoy en día está presente en una inmensa cantidad de alimentos procesados, sobre todo los que son ingeridos durante el transcurso del recreo.
La educación por parte de los profesores también abarca el período de entretenimiento y desconexión que tiene lugar entre las clases, así que en caso de ver a peques comiendo bollería o productos similares les recuerdan la importancia de evitarlos siempre que puedan.
Hacer más ejercicio
¿Qué tiene que ver el ejercicio con la dieta? Mucho más de lo que pueden llegar a pensar los niños y las niñas de Andalucía. De hecho, sus profesores siempre les recomiendan que hagan actividad física más regularmente.
El motivo reside en que un organismo que ha sufrido un cierto desgaste exige reponer fuerzas cuanto antes, especialmente a través de frutas como el plátano. Así pues, durante el post-entreno a los infantes les será más fácil comer ciertos productos muy saludables.
