Mis experiencias relacionadas con la informática desde mi niñez me han permitido conocer diferentes entornos digitales a los que he ido adaptándome de forma camaleónica a medida que estos evolucionaron, tanto a nivel de software como de hardware. Esto ha hecho que conozca decenas de sistemas operativos, aplicaciones y máquinas con diferente hardware y prestaciones.

La conservación, cuidado y mantenimiento del material informático y de los datos que ha estado siempre bajo mis manos ha sido una premisa fundamental y forma parte de mi decálogo particular.

Se han dado circunstancias de ensayo-error que me han permitido aprender de forma autodidacta, y que aún a día de hoy día sigo realizando en mi quehacer diario para solventar los problemas que van surgiendo y a los que hay que dar respuesta de forma inmediata.

Gran parte de mi autoaprendizaje a estado basado en instalar servidores locales con instalaciones de software de gestión de contenidos como WordPress, Drupal, Joomla o Moodle, en los que me he especializado bastante.

El software de edición, en sus versiones de texto, audio, y vídeo, y la automatización de procesos, gestión de recursos digitales, bases de datos y actuaciones como community manager han sido también de mi interés y parte de mi aprendizaje. Interés y uso del software libre en general.

Apuesto firmemente por el uso de recursos digitales para la mejora del proceso de enseñanza-aprendizaje de las personas, así como la autoformación y aprendizaje en línea. No dejamos de aprender durante toda nuestra vida.

La experiencia en el sector educativo al cabo de los años, tanto como docente como líder pedagógico del centro en el que trabajo, me ha llevado a ampliar conocimientos en torno a las relaciones personales y laborales, necesidades de formación tanto del profesorado como del alumnado, gestión de recursos, relaciones comerciales, así como obtener una mejor y más amplia visión de los procesos educativos que hoy día marcan nuestra sociedad, sin descuidar el detalle.

Saber adaptarnos,  ver las necesidades reales y hasta dónde podemos llegar, así como ver si estamos sobrevalorando o sobreestimando los recursos materiales disponibles que tenemos a nuestro alcance, sin conocer sus verdaderas prestaciones y posibilidades, y si se aprovecha todo su potencial, forma parte de mi labor.

No olvidemos que en cualquier sector debemos tener siempre presente estos tres conceptos: FORMACIÓN – FORMACIÓN – FORMACIÓN.