Los cilindros y los conos son figuras de revolución, es decir, son generadas por una recta generatriz que gira tangente a una circunferencia directriz no coplanaria.

En el caso del cilindro, la recta se mantiene siempre paralela a una dirección. Si esa dirección es perpendicular a la circunferencia el resultado es un cilindro recto.

En el cilindro, la generatriz pasa por un punto no coplanario con la circunferencia. Si ese punto se proyecta perpendicularmente sobre el centro de la directriz, el cono es recto. La distancia entre el punto fijo y la base se considera altura del cono.

Trazado del cono recto de revolución, con la base apoyada sobre (H), conocidos el radio de su base y su altura.

En esta posición la figura no presenta dificultad, puesto que su base estará en VM en proyección horizontal y la altura lo estará en proyección vertical. Nótese que en su proyección vertical debemos representar únicamente las generatrices de contorno: aquellas situadas más a la izquierda y más a la derecha.

Trazado del cilindro recto de revolución, con una de sus bases contenida en (H), conocidos su altura y el radio de su base

Al igual que en el caso anterior, los datos del problema se encuentran en VM en alguna de sus proyecciones.