1. Bullet Journal para estudiantes (y para cualquiera): Uno, ¡tira la agenda!
Querida alumna:
Hoy, a última hora, me he comprometido contigo. Te he prometido que escribiría una serie de entradas contándote cómo puedes implementar el método Bullet Journal en tu día a día como estudiante de 2.º de bachillerato. Bueno, también se lo he prometido a tu compañero de 3.º de ESO. No voy a hacer ningún video para explicártelo, tranquila. No creo que un vídeo sea mejor que un trozo de texto y unas fotografías. Mi idea es escribir una serie de entradas en el blog explicándote cómo utilizo el cuaderno que me ves todos los días en el instituto, y que utilizo para organizarme. Desde ahora voy a sugerirte cómo podrías utilizarlo tú para gestionar, sobre todo, las tareas académicas, personales y sentimentales que has de acometer día a día, pero sobre todo durante tus tardes. Quiero que aprendas y compruebes que una alumna organizada brilla y rinde más académicamente que otra alumna más lista o más tonta, pero desorganizada. Tengo evidencias y argumentos, y son irrefutables.
No dilato más el comienzo. Empezaré desde cero e iré al grano. Poca literatura. Y cuando escribo desde cero es desde cero, es decir, desde la elección del cuaderno y bolígrafo hasta el momento en que lo completes y tengas que archivarlo. Antes de continuar me gustaría mencionarte el libro que me ayudó a implementar este método: El método Bullet Journal, de Ryder Carroll. Y la web oficial donde vi hace ya algunos años un primer vídeo que desencadenó todo: https://bulletjournal.com/pages/learn.
El cuaderno
Primer paso: ¡Tira tu agenda a la basura! No exagero. Cómprate un cuaderno. Vas a adecuar tu cuaderno a tu vida y no tu vida a una plantilla preconfigurada en días y semanas. No tiene sentido una agenda que se queda, la mayoría de las veces, vacía los sábados y domingos y los meses estivales y corta para algunos días abarrotados ¡Qué desperdicio de papel!
En teoría te valdrá cualquier cuaderno, pero te recomiendo el formato A5 (la mitad de un A4) y pautado con «dotted», aunque también los he utilizado de cuadraditos; por cierto, «dotted» significa que el papel está pautado con unos puntitos. Así:

Desde que empecé a practicar el método BuJo utilizo los cuadernos Leuchtturm1917 que me descubrió mi amigo Rafael hace ya algunos años. Son caros, pero un cuaderno de este tipo suele aguantarme cuatro o cinco meses. Por ejemplo, el que tengo ahora lo cierro este mes, que es el sexto (mayo-octubre). ¿Qué ventajas tiene esta marca de cuadernos? Traen 251 páginas ¡numeradas! (los que más número de páginas traen). La numeración de la página es importante porque será indispensable que las numeres para tener ubicado el contenido de algunas de las cosas que escribas en tu cuaderno. Si el cuaderno que elijas comprar no trae las páginas numeradas, habrás de hacerlo tú con un bolígrafo. Además, el papel de las Leuchtturm1917 es de calidad, y para mí calidad significa que la tinta de un Pilot Vball negro, que es el bolígrafo que utilizo con más frecuencia para mi Bujo (ahora diré por qué), no traspasa. ¿Qué mas ventajas? Viene con el diseño del «Índice» (ya veremos para qué sirve) al principio y además, después de la última página, trae un bolsillito de cartón muy elegante que te permite introducir algún papelito suelto. He usado otras marcas como Lemome, pero al final, siempre regreso a las Leuchtturm1917.


No obstante, como pienso ilustrar la serie de estas entradas sobre tu organización personal y aprovechamiento de las tardes, he comprado esta tarde en el Tiger el cuaderno que te presento por 5 € y es perfecto para empezar a practicar el método y organizarte la vida y las tardes de estudiante. No tiene el índice hecho, ni las páginas están numeradas ni tiene bolsillito final, pero su papel es bueno para lo que queremos y está pautado con «dotted». Mira:


El bolígrafo
He utilizado multitud de instrumentos de escritura para completar las páginas de mi Bujo. Desde plumas estilográficas hasta rotuladores indelebles, pero al final, y ya llevo un tiempo con él, he optado por el Pilot Vball negro o azul. ¿Por qué? Lo primero porque me gusta la caligrafía que logro trazar cuando lo uso. Y después, es una razón poderosísima, porque una vez la tinta seca, no se corre cuando le pasas por encima un rotulador de color o un subrayador. Es una manía, pero no soporto que la tinta se corra cuando le aplico encima un color. En ocasiones subrayo de color algunas partes de la página y no tolero ese «corrimiento». De todos los bolígrafos «asequibles» que he probado, el Pilot VBall es el único cuya tinta no se corre, y por ese motivo lo utilizo. También puedes utilizar un Bic, pero siempre que lo hago, la esferita que tienen a mitad de uso empieza a dejar mojoncitos de tinta insufribles (no habrá foto de eso).

Estuve durante mucho tiempo utilizando los Pigma Micron y los Staedtler pigment liner, pero son caros y duran mucho menos que un Pilot Vball. No me cuentes que tengo que probar tal o cual bolígrafo, porque los he probado casi todos, por lo menos los asequibles (no más de 2 € en un bolígrafo)
Si tienes tu cuaderno, tu bolígrafo y ganas para tomar el control de tu tiempo para rendir al máximo académicamente, espérame en la siguiente entrada dentro de unos días. Necesito configurar el cuaderno que he comprado para tal fin. Empezaremos con el índice y con la sección «Al futuro», como a mí me gusta llamarla («Future Log» en el método original). Quiero que apruebes con sobresaliente la Lengua primero, y después todas las demás. Ah, y quiero, por supuesto, que tu salud mental siga intacta, a pesar de la cantidad de tareas que te esperan en los próximos meses:
No quiero marcharme sin enumerarte algunas de las razones por las que es vital que utilices papel y bolígrafo en lugar de una App:
- Cualquier libreta es una potente arma para hacerte aflorar oportunidades y eliminar distracciones y así enfocar nuestro tiempo en lo que verdaderamente nos importa.
- Cuando escribes las cosas en una libreta estás sacando esas cosas de la cabeza y despejas tu mente
- Una libreta te obliga a prestar atención a lo que estás escribiendo evitando que tu atención se disipe, como sucede cuando utilizas la tecnología.
- Un cuaderno depende de su autor. Su función está limitada a la imaginación de su propietario, es decir, tú.
- Con una libreta, cada día simpre empiezas de cero y eso mola un montón.
- Cuando escribes tus pensamientos en un papel les das vida.
- Tomar notas con nuestras propias palabras mejora la manera en que nos relacionamos con la información.
- Uno de los primeros capítulos del libro que te he mencionado al principio acaba así:
Un buen amigo me dijo una vez: «El camino más largo es el más corto». En un mundo de corta y pega que celebra la velocidad, a menudo confundimos facilidad con eficiencia. Cuando tomamos atajos, perdemos oportunidades de frenar y pensar. Escribir a mano, por muy nostálgico y anticuado que parezca, nos permite tener esa oportunidad. Cuando dibujamos las letras, empezamos a separar automáticamente el grano de la paja. La verdadera eficiencia no consiste en la velocidad, sino en invertir más tiempo en lo que de verdad importa. En este consiste el método Bullet Journal Ryder Carrol en El método Bullet Journal
Querida alumna, visita una papelería y compra un cuaderno y un bolígrafo. Te espero en la próxima entrada. Por favor, tráete a algún compañero de clase o, al menos, divulga esta primera entrada. Os vendrá muy bien, veréis.