“Conóceme por mis habilidades, no por mis discapacidades”

  Hermosa frase que dicha así, nos hace pensar y suena bien, pero que luego para muchas personas y en diferentes situaciones cuesta ponerla en práctica.

  Debemos de intentar que el Día de la Discapacidad no sean palabras enarboladas en un momento determinado, sino una realidad que todos vivamos con normalidad día a día.

  De verdad…, aprendamos a mirar más allá de lo que vemos, pues TODAS y cada una de las personas que nos cruzamos en nuestro camino tiene algo que enseñarnos y nosotros siempre tendremos cosas que aprender.

  A veces la “discapacidad” no es solo algo que está en un papel y que a veces para bien o para mal, determina cómo es una persona y a veces desgraciadamente su futuro…, sino que esa simple palabra se magnifica en la mente de los que no se molestan en formar parte de ese mundo maravilloso que intentan vivir las personas con estas etiquetas.

  Cierra los ojos y escucha, tápate los oídos y siente, no hables y mira descubriendo lo que hay a tu alrededor, si el movimiento es difícil, deja que tu mente viaje por ti, disfrutemos de la simpleza de ser niños y sobre todo…molestémonos todos en conocernos sean cual sean nuestras capacidades.

 Os invito a convivir sin miedo con las cosas y personas especiales, a fin de cuentas… todos somos especiales, solo hay que descubrir en qué y desarrollarlo sin miedo a mostrarlo a los demás.

Chary.

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