Monumentos

 

1. Castillo

En lo más principal de la población se emplaza el castillo, uno de sus más importantes monumentos junto a la parroquia.

La existencia de una fortaleza consta desde época musulmana y también en los documentos cristianos del siglo XIII, en los que sólo se hace referencia a la torre de Cañete. A finales de esa centuria y por donación real pasa a manos de Alfonso Fernández de Córdoba, señor que levanta el castillo ya dentro del siglo XIV, aunque posteriormente se ampliaría y reformaría.

Este baluarte, que tuvo varios recintos amurallados con torres, se encuentra en la actualidad disminuido y englobado en el caserío de la villa, siendo lo más relevante de lo conservado la gran torre prismática que hoy sirve de acceso, construida en su mayor parte de piedra y con el cuarto superior de ladrillo, donde se ve una bella ventana mudejar con dos arquillos lobulados.       

                              

2. Parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción

La parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción fue mandada construir por el obispo D. Fernando de Mesa en 1260 aunque el templo actual puede ser de época de los Reyes Católicos. Su estructura es de una iglesia de tres naves con arcos apuntados sobre pilares. A los pies de la iglesia está la portada principal, muestra importante del Renacimiento cordobés, que se hizo entre 1577 y 1578 por el cantero Cristóbal de Rojas. Concebida a manera de arco de triunfo, lleva columnas dóricas sobre altos pedestales con óvalos moldurados, y entre dichos apoyos un arco de medio punto decorado. El cuerpo superior está formado por tres nichosy semicúpula de casetones en el centro. En el arquitrabe se desarrolla la siguiente inscripción: «ACABOSE ESTA OBRA A 4 DE ABRIL AÑO D. 1578». Destaca su torre de belleza extraordinaria.

 

3. La Tercia

La Tercia

Un lugar especial dentro de los monumentos del pueblo lo tiene la Tercia del S. XVIII, que representa uno de los más importantes ejemplos de arquitectura civil de la provincia de Córdoba, uniendo el funcionamiento propio de su uso como granero a una cuidada construcción de austera grandiosidad. Según lo usual esta clase de edificios se compone de un amplio bloque de ladrillo montado en tres pisos y de un patio delantero al que se accede por una portada con pilastras.   

                                                                             

4. Ermita de Madre de Dios

Ermita Madre de Dios

Fuera del nucleo urbano se localiza la ermita de Madre de Dios, en la que se encuentra la imagen de la Virgen del Campo, patrona de la villa. Su origen se remonta por lo menos al siglo XVI, y de entonces debe venir su disposición de nave única con cabecera cuadrada. No obstante, la fabrica actual obedece a una reedificación barroca, que se realizó aproximadamente entre 1728 y 1735. En ella cabe destacar la gran cúpula del presbiterio, con una riquísima decoración de blancas yeserías de rizados follajes sobre fondos azules y rojos, que pueden figurar entre las más hermosas de su tiempo.

 

5. Ermita de Jesús

Es un templo de nave única que aún conserva unos bellos artesonados con las típicas lacerías de abolengo mudéjar. Su sencilla portada de piedra es una obra caraterística de finales del siglo XVII.

Ermita de Jesús

Según, un documento de 1877 ésta era conocida como la ermita de Nuestra Señora de la Concepción. Es toda ella de piedra, las pilastras con resaltes, la rosca del arco moldurada y dentro del frontón partido, una hornacina avenerada con frontón triangular. En su interior presenta una cruz de piedra. La espadaña es de ladrillo con un solo vano.

Interiormente muestra una planta de cajón con un presbiterio sin diferenciar de la nave, salvo por las gradas y la forma ochavada de la techumbre en la cabecera. 

Destacar la cubierta que es de artesonado mudéjar sin policromar. Toda la nave está cubierta por esta techumbre de par y nudillo de tres faldones y ochavada en la cabecera mediante cuadrantes, que es de jaldetas lisas, los nudillos se hallan decorados con sogueado aunque unos lo llevan pintado y otros grabado.

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