Primeros inquilinos llegan a los nidos del proyecto de Control Biológico
por Ainhoa Ruiz de Larramendi Fernández · Publicada · Actualizado
El proyecto de Control Biológico mediante la instalación de nidos de aves insectívoras y refugios para murciélagos, impulsado por el CEIP Federico García Lorca de Vícar (Almería), en colaboración con la Asociación Hábitats en Acción y la empresa Agrinova Science, está comenzando a mostrar sus primeros y prometedores resultados. Esta iniciativa, concebida como una herramienta tanto ecológica como educativa, ha conseguido que los primeros nidos instalados en el centro educativo comiencen a llenarse de vida.
Los primeros visitantes: gorriones
Durante esta semana, se ha confirmado la ocupación de los nidos por gorriones comunes (Passer domesticus), una de las especies más emblemáticas de entornos urbanos y rurales. Estas aves, además de ser fácilmente reconocibles, juegan un papel clave en el equilibrio ecológico al alimentarse de insectos y semillas.
Se espera que en las próximas semanas también puedan llegar carboneros comunes (Parus major), conocidos por su canto y su utilidad como controladores naturales de plagas, y vencejos (Apus apus), aves migratorias que cada primavera cruzan miles de kilómetros desde África para anidar en nuestras latitudes y consumir grandes cantidades de insectos voladores, como mosquitos.
Educación ambiental en acción
Uno de los aspectos más destacados del proyecto es su enfoque participativo. Los propios alumnos y alumnas han participado en la construcción e instalación de los nidos, lo que ha reforzado el aprendizaje activo y el compromiso con el medio ambiente. Observar cómo sus creaciones comienzan a formar parte del ecosistema les permite comprender de manera directa la importancia de cuidar la biodiversidad desde acciones concretas.
Como afirma el director de nuestro centro, Agustín, “ver que los nidos construidos con nuestras propias manos están ayudando a los animales a encontrar hogar es una experiencia emocionante y educativa”.
Refugios para murciélagos: un futuro prometedor
Además de los nidos para aves, el proyecto contempla la instalación de refugios para murciélagos insectívoros, otra herramienta de gran valor para el control biológico de plagas agrícolas y urbanas. Aunque de momento estos refugios aún no han sido ocupados, se mantiene la esperanza de que en los próximos meses comiencen a ser habitados.
Estos quirópteros son vitales para el equilibrio del ecosistema y pueden llegar a consumir varios miles de insectos en una sola noche. Su presencia, por tanto, contribuirá notablemente a reducir el uso de pesticidas y fomentar una agricultura más sostenible.
Expansión del proyecto en la Sierra de Gádor
El impacto de esta iniciativa va más allá de las aulas. Parte de los nidos también fueron instalados en la Sierra de Gádor, en el marco de una jornada de reforestación participativa que reunió a más de 200 personas, entre estudiantes, empresas, asociaciones, instituciones y voluntariado ambiental. En esta acción se plantaron especies autóctonas como algarrobos y cipreses de Cartagena, con el objetivo de recuperar ecosistemas degradados y aumentar la biodiversidad.
Este componente de acción directa en entornos naturales refuerza el valor del proyecto como una estrategia integral que combina educación, restauración ecológica y participación ciudadana, en una clara muestra de un proyecto de aprendizaje y servicio.
Una apuesta por el futuro
El CEIP Federico García Lorca y sus aliados continúan demostrando que la educación ambiental puede ser una herramienta poderosa para cambiar el entorno y las conciencias. Gracias a iniciativas como esta, los más pequeños no solo aprenden sobre ecología en los libros, sino que se convierten en protagonistas de un cambio real, tangible y duradero.
Desde la comunidad educativa, se agradece profundamente la implicación de todas las personas, asociaciones y entidades que están haciendo posible este ilusionante proyecto.
¡La naturaleza vuelve, y es gracias a todos!



