Una vez analizado el contexto nos tuvimos que plantear unos objetivos específicos, medibles, realistas, temporalizados y que fueran alcanzables.
Tengo que reconocer que mi prioridad se centró en generar una experiencia que proporcionara un cambio a nivel personal en las alumnas a las que iba dirigido, procurar elevar o transformar una vivencia personal en una cualidad pedagógica, “pensar en grande” como diría Maria Zambrano.
Era ambiciosa, creo que en la vida hay que serlo, y trabajar por sueños. Esto es lo que quería que aprendieran “No hay nada imposible, tampoco nada gratis, hay que luchar por los sueños, superar los obstáculos, aprender de los errores: aprender de ellos, no frustrarse y fomentar la cultura del esfuerzo”
Pero esta prioridad no significaba que sólo fuera un proyecto destinado a ellas, mediante el proyecto también pretendía visibilizar la profesión y el centro educativo para mejorar la orientación de fturos alumnos y alumnas.
En concreto, el proyecto tiene cinco objetivos básicos:
- Promoción y visibilización de la profesión y apertura de nuestro centro al entorno.
- Reducción del abandono escolar temprano y el absentismo.
- Incremento de la motivación del alumnado.
- Mejora significativa de los recursos intelectuales y emocionales centrándonos en el desarrollo de:
- la inteligencia emocional, en concreto de la autoestima y el trabajo del autoconcepto, permitiendo así el empoderamiento personal y la valoración de la personalidad, las aspiraciones, actitudes y formación propia para la toma de decisiones.
- la creatividad y su relación con los pensamientos positivos según estudios recientes de las neurociencias.
- las habilidades emprendedoras en sus tres facetas: personal, productivo y social, que le permitan ser competentes para la búsqueda de alternativas de autoempleo en el sector.
- estrategias de trabajo en equipo. Valorando su eficacia para la consecución de los objetivos, identificando las características del trabajo eficaz y aprendiendo a resolver conflictos.
- Talentos a través de autoanálisis, formación continua, cultura del esfuerzo y definición de objetivos profesionales aprendiendo a valorar la innovación y la adaptación a los cambios.
- Incremento de la empleabilidad a través del desarrollo de las competencias blandas (soft skills) y formación en técnicas y procedimientos innovadores. Capacitando al alumnado para la selección de oportunidades de empleo identificando las posibilidades de inserción y las alternativas de aprendizaje a lo largo de la vida como factor clave para la empleabilidad, búsqueda de la excelencia y adaptación a las exigencias del proceso productivo y de la vida.
