Hoy 3 de agosto, también se celebra el Día de la Sandía. Originaria del sur de África, seguro que esta fruta está refrescando tus comidas veraniegas. Desde la antigüedad, la sandía era un refresco ideal para largos viajes, gracias a su gran cantidad de agua.
Esta fruta proviene de una planta rastrera que puede alcanzar hasta los cuatro metros de largo dependiendo del lugar donde se desarrolle y de las condiciones climáticas. Es importante mencionar que este producto se distingue por contener una gran cantidad de nutrientes y propiedades medicinales, mismas que lo hacen un fruto con gran demanda a nivel mundial, además se caracteriza por ser muy resistente, por lo tanto se puede adaptar con facilidad a diferentes sitios.
La sandía es fruta porque dentro de sí están las semillas, pero también es verdura porque forma parte de la familia de las cucurbitáceas, que incluye a la calabaza, el calabacín y el pepino.
La sandía tiene su origen en el desierto de Kalahari, en el continente africano, donde aún hoy en día crece de forma silvestre. No obstante, existen evidencias arqueológicas de que se cultivaba en Egipto 3 000 a.C., donde se expandió en las fértiles márgenes del río Nilo. Desde aquí, pasó a los países mediterráneos, Italia, Grecia o España.
Con la decadencia del Imperio romano se perdieron los cultivos, pero los árabes la llevaron de nuevo a España y de ahí, al resto de Europa. Las rutas comerciales entre árabes y chinos, hicieron que se expandiera su cultivo a China, de ahí a Japón y a India.
Los exploradores españoles y portugueses la llevaron a América, extendiendo su cultivo por todo el continente. Los principales productores de sandía en el mundo siguen siendo algunos de los primeros países que la cultivaron en Europa, como España, Italia o Grecia, así como China, Japón y Turquía.
La palabra sandía viene del árabe (sindiyya, que proviene de Sind, región del Pakistán por donde pasa el río Sindu, actualmente río Indo, desde donde les llegó a los árabes el fruto). De ahí deriva también el nombre catalán: síndria o xíndria. No obstante, a veces se llamaba también battiha (melón en árabe), del cual deriva otra denominación española, badea, albudeca.
Esta celebración se creó con la finalidad de tener una ocasión especial para darse el capricho de comer esta deliciosa y sanísima fruta. En Estados Unidos se trata de una celebración nacional annual. Por eso, hemos pensado en robarles la idea y promulgar los beneficios de la sandía al otro lado del charco.
Sobran los motivos para explicar que en un día caluroso de verano, nada entra mejor que una rica y fresca taja de sandía. Además, al ser rica en azúcares naturales, vitamina A, C, potasio, y, no nos olvidemos de la cantidad de agua que tiene (92%), se trata del complemento perfecto para ayudarte a mantenerte activo e hidratado en un día de verano.
Si queréis aprender a realizar recetas de sandía, os dejamos el siguiente enlace https://www.pequerecetas.com/receta/7-recetas-originales-sandia/
