Hoy queremos aprovechar el día de la discapacidad 3 de diciembre de 2020, para rendir homenaje a esta extraordinaria y valiente mujer: MARÍA MONTESSORI.
A pesar de haber tenido una constante lucha con las convenciones, estereotipos de su época y realizado sacrificios en su vida personal, como separarse de su propio hijo, por haberlo tenido en estatus de madre soltera, no habiéndole permitido hacer la carrera a la que tanto aspiraba. Os resumimos lo que más admiramos de ella.
A María le gustaban las ciencias exactas y soñaba con ser médica o ingeniera desde la infancia. Su padre no creía que ella debiera recibir educación y el hecho de convertirse en médica era completamente impensable para la sociedad italiana a finales del s. XIX.
Cuando ingresó en la Facultad de Medicina sus mismos compañeros consideraban su presencia indecente, expresaban abiertamente su disgusto porque ella era mujer. Pero a pesar de tener un difícil ambiente psicológico no le impidió terminar su carrera de pediatría y psiquiatría y trabajó en el servicio de emergencias como consultora pediátrica, convirtiéndose en una experta en medicina pediátrica y en una de las primeras mujeres en recibir el título de Doctora en Ciencias.
¿Por qué homenajear a María Montessori en el día de las Personas con Discapacidad? Porque fue una persona valiente y decidida en salvar a los niños/as que se creía no tener esperanza. María notó que algunas formas de retraso mental, que en ese momento se consideraban una sentencia absoluta, podían compensarse. Por lo que decidió trabajar con esos niños/as y que se desarrollaran, por lo que comenzó a estudiar los trabajos de otros médicos y maestros. Por lo que sobre su base y apoyándose en su experiencia, empezó a crear su propio sistema.
Su trabajo fue notado y cuando se creó el Instituto Ortofrénico, una institución especial para preparar maestros para enseñar a niños/as con discapacidades mentales, Montessori fue nombrada subdirectora. Allí se aceptaba a los niños que figuraban como «retrasados» en las escuelas comunes debido a las peculiaridades de su psique, pero que no siempre tenían un retraso mental. Los maestros notaron sus primeros éxitos cuando este alumnado aprobaban fácilmente los exámenes que estabas preparados para los «niños normales».
A la vez que ella empezaba a tomar fama su hijo se hizo adulto y comprendió los sacrificios de su madre para poder conseguir su sueño, éste apoyaba las ideas de su madre, trabajó como traductor para ella, luego continuó su labor y defendió ardientemente los principios del método Montessori durante toda su vida. Siempre manifestó que jamás pensó que su madre fue una mala madre y le acompañó hacia la fama mundial , porque a María, le ayudó el hecho de que personas influyentes adoptaran sus ideas, pro lo que se sintió apoyada y avanzó rápidamente su éxito profesional.
La base de los principios del método que María desarrolló era bastante sencillo: Un niño/a debe poder elegir lo que quiere hacer, desarrollar independencia y responsabilidad, pero buscando respuestas a sus preguntas en sí mismo, aprendiendo a sentir sus necesidades e inclinaciones. Un adulto puede ayudar, pero en ningún caso dirigir o presionarlo.
Os dejamos más información de su biografía, de Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Biografia de Maria Montessori. En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Barcelona (España). Recuperado de https://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/montessori.htm el 1 de diciembre de 2020.
¡Tenemos muchas razones para homenajear en este día a esta gran mujer y desde aquí darle las gracias por todo lo que ha hecho por las personas con discapacidad, por los avances en la educación, medicina y por la lucha por la igualdad de las mujeres !