Enrique Duarte González
Hoy nos hemos despertado en el hotel y hemos notado que ya no estábamos en nuestra casa italiana. Después de desayunar hemos ido al centro de Bolonia a dar una vuelta por la ciudad. Hemos visto la fuente de Neptuno (un poco rara y curiosa), la Piazza Maggiore, la Basílica de San Petronio,… aunque muchas de estas cosas las vimos también ayer, hemos vuelto a disfrutarlas porque hoy hacía sol, había mucha más gente, artistas callejeros… parecía que la ciudad tenía más vida, ha sido un buen broche para terminar nuestra visita a Italia.
A las dos hemos vuelto al hotel a recoger las maletas y pillar un taxi para ir aeropuerto y ya comer allí, pero después de comer, cuando ya estábamos dispuestos para subir, anunciaron que nuestro vuelo se retrasaba una hora y media. Un imprevisto más, bueno, con toda la calma, nos hemos sentado en el suelo a esperar, no pasa nada😄
Al subir al avión, algunos nos hemos dormido de lo cansados que estábamos. Ya al llegar a Málaga, otra vez en el minibús para volver a nuestras casas y todos muy felices por todo lo que hemos vivido. Será una semana inolvidable.
Volvemos muy agradecidos de Italia porque:
– Hemos conocido a mucha gente maravillosa que ha hecho que nos sintamos en casa estando a muchos kilómetros de nuestra zona de confort.
– Hemos vivido las costumbres de otro país, de otra cultura y hemos visto que se puede ser feliz de muchas maneras.
– Hemos intentado mejorar nuestro inglés con nuestro alumno espejo y de paso hemos aprendido algunas palabras en italiano.
-Hemos vivido situaciones que no esperábamos (provocadas por la lluvia) y hemos visto que todo, o casi todo, tiene arreglo.
En fin, este viaje ha sido una gran experiencia para nosotros, el Programa Erasmus nos ha ayudado a crecer y a ampliar nuestros horizontes.
Por Marcos Olmo Cabeza
