Conclusiones
– Se desconoce qué es la alimentación sostenible.
– La producción y la elaboración de los alimentos son los dos aspectos más insostenibles; después el consumo y, por último, el transporte.
– La población está concienciada del tema de los residuos (de alimentos y plásticos), pero no del consumo de productos sostenibles, por desconocimiento.
– Se cree que los dos principales responsables de que no se consiga una alimentación sostenible son las empresas de elaboración, envasado y distribución, y los gobiernos.
– Se considera que los gobiernos deben legislar.
Hipótesis
– Si conseguimos que las personas sepan qué es la alimentación sostenible, se podrá actuar al respecto. (Actuaciones horizontales)
– Si damos a conocer pequeñas acciones que fomenten el consumo de alimentos sostenibles, empezaremos a cambiar la situación.
(Actuaciones horizontales)
– Si proponemos una iniciativa legislativa popular que recoja nuestra solución al reto, además de seguir concienciando y otras acciones en las que el poder político se vea inmerso, elevaremos el problema a instancias mayores.
(Actuaciones verticales)
Acciones
1.- Campaña: Materiales y difusión en redes.
Materiales:
– imagen campaña
– Podcast: Podcast de A fondo sobre el tema. Mesa coloquio con los sectores implicados en el tema.
-Vídeo informativo sobre qué es.
– Decálogo de buenas prácticas
-Vídeo de concienciación
2. A partir del material de la campaña, talleres a alumnado y familias.
3. Canjear puntos por consumir alimentos sostenibles en recreo para conseguir premios.
4. Guía de alimentos sostenibles.
5. Comparar dos días en la alimentación de una familia (antes/después de saber qué es la alimentación sostenible).
7. Taller de cocina con abuelas, familias y alumnado para elaborar un recetario local, hecho con productos locales y de temporada. Difusión.
8. Campaña de información (campaña, recetario…) y recogida de firmas para nuestra ILP (iniciativa legislativa popular) en el mercadillo de los martes.