Muchos usuarios de Windows XP no pueden, o no quieren, cambiar de sistema operativo. Y eso a pesar de que Microsoft ya no proporciona actualizaciones de seguridad para ese sistema desde el pasado 8 de abril de este año. Ciertos gobiernos, bancos y grandes empresas todavía están recibiendo actualizaciones porque están pagando por ellas. Sin embargo, los usuarios particulares ya no. Existe otra excepción para la versión de Windows destinada a entornos industriales: Windows Embedded Industry, también conocida como Windows Embedded POSReady. El caso es que Windows Embedded POSReady 2009 está basada en Windows XP Service Pack 3. Las actualizaciones de seguridad lanzadas para ese sistema industrial son idénticas a las que Microsoft habría lanzado para Windows XP.
Como Windows Embedded POSReady 2009 todavía va a disfrutar de actualizaciones de seguridad hasta el día 8 de abril de 2019, eso abre la puerta a conseguir otros cinco años más de margen para acceder a los parches de seguridad para Windows XP. Martin Brinkmann explica en Ghacks.net cómo lograrlo. Ahora bien, su truco sólo funciona con las versiones de 32 bits de Windows XP Service Pack 3, pero no con las de 64 bits. El método requiere modificar el registro del sistema. No es posible instalar a las actualizaciones directamente, porque da un error de versión. Aquellos usuarios de Windows XP que se atrevan a probarlo, lo primero, deben realizar una copia de seguridad de su sistema, por si acaso aparecen incompatibilidades sobrevenidas.
Lo único que hay que hacer es añadir las siguientes líneas al registro de Windows XP:
Windows Registry Editor Version 5.00
[HKEY_LOCAL_MACHINESYSTEMWPAPosReady]
“Installed”=dword:00000001
Para ello, lo primero es crear un documento de texto plano en el bloc de notas. Allí se pegan las líneas que figuran un poco más arriba, y se guarda el fichero con el nombre xp.reg. A continuación hay que hacer doble clic para ejecutar ese fichero con la extensión .reg recién creado. Otra alternativa es descargar el archivo que ha preparado Martin Brinkmann al efecto, que está disponible aquí, e instalarlo en el equipo.
Insistimos en que, antes de hacer ningún cambio en el registro, conviene realizar una copia de seguridad de todo el sistema, para poder restaurarlo si surgiera algún conflicto. Al fin y al cabo, las actualizaciones de seguridad que se van a instalar posteriormente están diseñadas para Windows Embedded POSReady 2009 y pueden no funcionar correctamente en todos los ordenadores PC con Windows XP.
La cuota de mercado de Windows XP ha descendido ligeramente en las últimas semanas, después de que los de Redmond cerraran el grifo de las actualizaciones de seguridad para ese operativo. De todos modos, Windows XP todavía está presente en el 27 por ciento de los ordenadores de sobremesa, frente al 49 por ciento de Windows 7 y al 6 por ciento de Windows 8, según Net Applications.