Ahora encuentroalgo que me sorprendió en poema pedagógico de Makarenko. Cómo aquella tecnología estaba presente en una posguerra tan brutal como la de la revolución rusa. Fue la diferencia entre pasar hambre o sobrevivir. La magia de leer, de lo que te encuentras en los largos caminos del tiempo y que ahora me aparece. La cita habla de algo tan simple como los límites del dinero. Va más allá y es que el conicimiento, en si mismo, es solidario, el límite lo ponen los muros, los aranceles o el dinero: tres dimensiones de un mismo concepto.