A partir del minuto diez de este vídeo que desarrolla una entrevista entre Berni Sander y Killer Mike, este último, presenta un concepto cargado de humanidad: Desconexión.
Killer Mike es un conocido rapero y activista afroamericano criado en un suburbio de Atlanta (Gerogia) y Berni Sanders fue el candidato que se enfrentó a Hillary Clinton en la candidatura del partido demócrata en el 2015. El video presentado pertenece a una serie de entrevistas realizadas en la Barbería de Mike. Como el mismo dice, realizar la entrevista en este lugar tiene un claro significado de concordia. Estos lugares, en el lugar donde se crió, han sido tradicionalmente un lugar de encuentro de hombres de toda condición. Dice Bernie Sanders que Martin Luther King no fue a Menphis (el lugar donde lo asesinaron) para apoyar los derechos de los afroamericanos, estuvo allí para apoyar una marcha de trabajadores pobres que no sólo eran afroamericanos, también, eran nativos, hispanos y blancos. Killer Mike lo interrumpe y en ese momento presenta un concepto, que a mi, me pareció mágico. Porque que supuso un choque cognitivo, una experiencia significativa que provocó un chorro de ideas que acabaron en un esquema de pensamiento concreto. Es el siguiente:
Existe un consenso en Europa para tratar el fracaso escolar, el término generalmente usado en la legislación y en los documentos oficiales, por acuerdo, es el de abandono escolar. Una palabra aparentemente neutra que evita el más negativo de fracaso, pero que se convierte en un eufemismo del mismo. Qué ocurre si a alguien se le pregunta ¿Por qué abandonaste la escuela? Directamente, al interlocutor puede inferir significados y preguntarse ¿Por qué abandoné la escuela? ¿No tuve la suficiente fuerza de voluntad? ¿Por qué fracasé? ¿No tuve la suficiente inteligencia, ni capacidad de trabajo intelectual?
Desde el punto de vista intelectual, en la escuela pública, siempre he preferido el uso del término Freiriano «Opresión». El desarrollo teórico del mismo implica que el fracaso y el abandono es una situación concreta de opresión que es multicausal y que no centra la culpa en el sujeto, en las personas que la Educación pública debe atender. Pero resulta que el uso de esa palabra suele verse como radical y, en todo caso, un poco rudo para algunas sensibilidades. Entre ellos a Bolsonaro que ha decidido desterrar y enterrar toda herencia de Paulo Freire de Brasil.
El término desconexión o conexión de Killer Mike, es un término que empodera. En el vídeo de más arriba el rapero explica como existe una desconexión orquestada, que intenta evitar que distintos grupos sociales conecten, que las personas conecten entre sí. Y a mi, me sugiere que no existe el fracaso escolar, ni el abandono, si no que lo que se produce es una desconexión. Es el niño o la niña quien decide desconectar del grupo clase, del escenario de aprendizaje que se le ofrece (por el motivo que sea). Es el o la adolescente de decidieseis años quien decide desconectar de su grupo de iguales, de su profesorado porque el escenario en el que está le es hostil o por cualquier otro motivo. El término desconexión es más humano. Si sacamos a cualquier chico o chica de clase por el motivo que sea, lo desconectamos de su grupo de iguales, de su profesorado habitual. En ese caso la decisión no es de ellos, en primera instancia. Así que surgen, ante este término, más humano, las siguiente preguntas ¿Es posible un escenario más amable que invite a la conexión de todo el mundo? ¿Está, por tanto, orquestada dicha desconexión? Si usamos el término desconexión, establecemos una interacción comunicativa concreta. Se puede desenchufar de una terminal de la pared cualquier aparato, y luego enchufarlo a otra. De igual manera, podemos desconectar de un escenario concreto para conectar en otra situación que nos resulte más amigable. Y para probar esta proposición preguntamos a un grupo de chicos y chicas, no por qué fracasaron, no por qué abandonaron, sino por qué desconectaron del sistema. Y aquí el resultado:
La conexión en si misma no implica nada más que un primer momento, pero es la condición sin e qua non que va a permitir establecer vínculos que hagan que fluya el suficiente cariño, consideración, y por qué no, amor; que a su vez construya la motivación para desarrollar los aprendizajes necesarios para el éxito escolar.
Estas ideas no surgen de la nada, ninguna lo hace. Las interacciones comunicativas son el fundamento del aprendizaje, y estas surgieron en el contexto del diseño del Foro Proeducar en la que participaron Ana González Grano de Oro, Luis Ibáñez, Charo López, Mari Díaz y Gonzalo Carretero. Sé que no son parte de sus procesos intersubjetivos, las matizarían, las desgranarían, las congelarían. Pero si las reconozco como suyas porque en mis procesos comunicativos intersubjetivos han sido fundamentales los suyos.
