Y SI EL LOBO FEROZ NO SIEMPRE FUE MALVADO…

Queridas familias, hoy hemos vuelto a visitar la Biblioteca del cole para tener nuestra primera sesión de cuentacuentos del año.

Dinoleo, que se entera de todo lo que pasa en nuestro cole, se ha dado cuenta de que nuestros pequeños/as ya están preparando cositas para celebrar el día de la No violencia y la Paz el próximo lunes. Ha tenido la genial idea de trabajar en colaboración con el Programa Escuela espacio de Paz y ha querido contarnos un súper cuento.

¿Crees que el Lobo Feroz siempre fue tan malvado? Con este divertido álbum hemos querido resaltar que nadie nace siendo el malo malísimo de los cuentos. Son las circunstancias que nos van ocurriendo día a día, las que os convierten en brujas envenenadoras de manzanas, piratas con garfio o lobos feroces.

En esta historia, el Pequeño Lobo se aburre en su casa y decide ir a buscar a sus amigos los Tres Cerditos. ¡Pero viven un poco lejos! Para el viaje en ascensor de los 47 pisos que separan sus casas, el Pequeño lobo se lleva un montón de provisiones, ¡pero le duran muy poco tiempo!

Pronto empiezan a entrar vecinos en el ascensor: el Conejo de Alicia, Mamá Oca, los Siete Cabritillos… y el Pequeño Lobo comparte su comida con todos ellos hasta que no le queda nada. Esto hace que se enfade mucho, pero mucho de verdad y, al llegar a la casa de los Tres Cerditos, dé un grito y un soplido que provoque que se vuelen los cimientos del edificio.

Desde ese momento, el Pequeño Lobo pasa a ser… ¡El Gran Lobo Feroz! para todos sus vecinos. Pobre Lobo, que seguía siendo el mismo bueno y Pequeño Lobo.