Dismorfia corporal
El trastorno dimórfico corporal se ha vuelto más habitual en los últimos años a causa de las fotos modificadas con filtros que los internautas suben a distintas aplicaciones. El trastorno dismórfico corporal (o TDC) se ha agudizado en los últimos años con lo que se ha denominado la dismorfia del selfie. Quien lo padece se compara con sus propias fotos retocadas y modificadas con filtros y compartidas en redes sociales.
Descrito por primera vez a finales del siglo XIX, el TDC es una percepción distorsionada de la imagen que se tiene de uno mismo, y quienes lo padecen ven o creen ver defectos en su físico que les hace desarrollar comportamientos obsesivo-compulsivos. Afecta en torno al 2 por ciento de la población
La influencia de las redes sociales, especialmente aquellas más centradas en las imágenes, ha agudizado el problema Hay cada vez más pacientes que acuden a las consultas de los cirujanos plásticos pidiendo parecerse a las fotografías que publicaban de sí mismos en redes sociales después de aplicar varios filtros.