COMUNIDADES DE APRENDIZAJE
En el C.E.I.P. Pedagogo García Navarro se han venido desarrollando desde el curso 2013/2014 experiencias participativas llevadas a cabo por medio del proyecto Comunidad de Aprendizaje que van consiguiendo, paulatinamente, transformar la realidad socioeducativa de la escuela y su entorno, movilizando la aportación cultural y educativa de muchas personas implicadas en la mejora de la educación.
Nuestra Comunidad de Aprendizaje es un proyecto de transformación que desde el centros educativo y a través de la utilización de ciertas herramientas, está focalizado en el éxito escolar y, en el cual, el proceso de enseñanza-aprendizaje no recae exclusivamente en manos del profesorado, sino que depende de la implicación conjunta del personal del centro educativo y de diferentes sectores: familias, asociaciones y voluntariado.
El proyecto educativo de nuestra escuela parte de prácticas exitosas que se han llevado a cabo en nuestra comunidad y que están sustentadas en sólidas teorías psicológicas, sociológicas, pedagógicas que se vienen poniendo en marcha en España en diversos centros educativos desde mediados de los años 90.
Se define una Comunidad de aprendizaje como “Un proyecto de transformación de centros educativos dirigidos a la superación del fracaso escolar y a la eliminación de conflictos”. En este proyecto se distingue por una apuesta por el aprendizaje dialógico mediante los grupos interactivos, donde el dialogo igualitario se convierte en un refuerzo común para lograr la igualdad educativa de todas las alumnas y alumnos.
“La transformación de nuestra comunidad está orientada hacia el sueño de la escuela que queremos conseguir: “NUESTRA ESCUELA”.
Atendiendo a este lema, a partir de ahora, el aprendizaje escolar no va a recaer únicamente en manos del profesorado sino que vamos a intentar conseguir una educación de gran calidad apoyándonos y contando con la participación conjunta del alumnado, las familias, las asociaciones, el barrio, el voluntariado, ONG…es decir, la implicación de toda la Comunidad, de todos los agentes que participan en la educación de nuestros niños y niñas.
Una Comunidad de Aprendizaje no es sólo un proyecto de centro educativo, sino que también es un proyecto del entorno, que se desarrolla mediante una educación participativa de la comunidad y que se fundamenta en el aprendizaje dialógico siguiendo los principios de diálogo, comunicación y consenso igualitario. Todas las investigaciones demuestran que el proceso de aprendizaje de las niñas y los niños dependen de la coordinación entre todas las actividades que llevan a cabo en los diferentes espacios de sus vidas (clase, hogar y calle). Para la generación de un aprendizaje dialógico deben darse los siguientes principios:
- El diálogo igualitario que parte de la premisa de que todas las personas que participamos en los procesos educativos deseamos lo mejor para nuestros/as hijos/as y para el alumnado en general, para ello es necesario que todos/as tengan las mismas oportunidades para intervenir en los procesos de reflexión y de toma de decisiones sobre temas educativos relevantes.
- La inteligencia cultural es una nueva concepción de la inteligencia que contempla la pluralidad de las inteligencias. El reconocimiento de la capacidad de aprendizaje y de la inteligencia de todas las personas, de cualquier lengua, cultura, barrio, etnia o edad, olvidándonos de nuestra supuesta superioridad cultural relacionada directamente con la inteligencia académica de la cultura occidental.
- Igualdad de las diferencias, el currículo no estará sesgado y los objetivos educativos deberán ser los mismo para todo el alumnado.
- La dimensión instrumental que asegure el dominio de las competencias básicas, por eso partimos de una propuesta de aprendizaje de máximos para todos y todas.
- A través de las interacciones, de un currículo de máximos. La escuela debe ser un lugar donde se aprende sin discriminación ni segregación.
- La transformación, la mayoría de las desigualdades sociales y culturales no tienen origen en la escuela sino fuera de éstas, por lo que es necesaria la transformación del entorno convirtiéndolo en un aliado de la institución educativa y no en un enemigo.
- La solidaridad como valor educativo no se consigue sino es a través de la práctica solidaria. Aprovechando la diversidad para el enriquecimiento mutuo, formando personas abiertas y fraternales.
El proyecto ofrece un marco global que da sentido a todas nuestras acciones cotidianas y diarias en nuestra comunidad en la incesante búsqueda de una educación de calidad.
Somos conscientes de las dificultades, sabemos que el grave problema de la exclusión social sobrepasa el ámbito educativo, pero también sabemos que la escuela tiene dos opciones claras: perpetuarla, a través del fracaso escolar, o ayudar a superarla. Nuestro centro se ha propuesto la segunda de las opciones y creemos que a través de la reflexión, del diálogo igualitario y la participación efectiva podemos ayudar a que la Barriada de las Palmeras, de la ciudad de Córdoba, inicie el proceso de transformación que todos y todas deseamos para conseguir nuestros sueños, “nuestra escuela”.
TERTULIAS DIALÓGICAS
GRUPOS INTERACTIVOS
