Una experiencia para repetir

Un mes y medio parece poco tiempo pero a pesar de ello, diría que me he adaptado bastante bien tanto a la ciudad como a la empresa.

Adaptarse a la ciudad ha sido relativamente fácil ya que está en la costa igual que Málaga, con una temperatura ideal y con unas playas en todo el Algarve que quitan el sentido. Los portugueses en general son bastante amables e intentan ayudarte en lo que pueden, aunque tengo que destacar que en esta zona viven muchos americanos e ingleses, por tanto el segundo idioma más hablado es el inglés. Los extranjeros que viven aquí de forma habitual suelen ser empresarios, jubilados o nómadas digitales. Además, hay mucho turismo de sol y playa desde el mes de abril hasta octubre aproximadamente. Debido a que la gente que viene de turismo o los que invierten aquí en algún negocio cuentan con un capital bastante más elevado del que dispone la gente local, el mercado inmobiliario se ha aprovechado de esta situación y en los últimos años los precios de las viviendas se han disparado y es prácticamente imposible encontrar piso a un precio decente. En Portugal, al ser un país pequeño, es muy fácil y económico moverse en autobús de una ciudad a otra, así que cuando puedo, aprovecho y voy a Lisboa. Eso sí, la puntualidad de los autobuses no es su punto fuerte, siempre llegan tarde. Hablando de medios de transporte, destaco especialmente el Uber, Bolt, Taxi, patinete, etc., ya que hay muchas opciones en todo el país para moverse en una ciudad y son bastante más económicas que en España.

La comida portuguesa es espectacular, sobre todo el pescado y el marisco. No hay nada como un espeto de sardinas en Pedregalejo pero aquí se come muy bien también. Además, los vinos y la cerveza portugueses son una muy buena opción para acompañar una comida. Respecto a la empresa, cada vez voy controlando más la forma de trabajar de la agencia y realizo las tareas casi siempre de forma autónoma y sin supervisión. La agencia está especializada en organizar viajes a España y a Portugal y la gran mayoría de sus clientes son americanos, por tanto toda la comunicación con los clientes es en inglés. En definitiva, estoy intentando aprovechar esta oportunidad al máximo y a pesar de ciertas dificultades me quedo con todo lo positivo y con la experiencia en sí.

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