AGRUPAMIENTOS PARA EL APRENDIZAJE COOPERATIVO

«Estoy decida, este curso voy a llevar a cabo estructuras cooperativas a mi aula. ¿Por dónde empiezo

Una compañera me hizo esta pregunta hace unos días y voy a intentar darle respuesta y compartirla con vosotr@s.

Yo creo que el aprendizaje cooperativo es una filosofía de trabajo, se trata de abandonar la idiosincrasia de la escuela tradicional en la que subyace la competición y la comparación.  Es por ello que, es importante diseñar estrategias para desaprender esta estructura individualista de relación social competitiva en el aula y reaprender modelos cooperativos, dado que los seres humanos somos más eficientes si cooperamos.

Además, el aprendizaje cooperativo es compatible con distintas metodologías. Se puede combinar con clases expositivas o con metodologías activas.

Eso sí, cuando hablamos de aprendizaje cooperativo no lo hacemos como sinónimo del tradicional «trabajo en equipo».  Debemos generar relaciones de interdependencia positiva: «aprender juntos siempre es aprender más«, procurar una igual participación, definir responsabilidades individuales y colectivas y diseñar estructuras que requieran la interacción simultánea.

Para empezar crearemos equipos cooperativos.

Es necesario invertir tiempo en el aprendizaje de habilidades de trabajo en equipo y en generar sinergias que cohesionen el equipo.

¿Cómo agrupo a mi alumnado?

Tengo que valorar cuál de los tipos de agrupamientos me interesa más para alcanzar los objetivos que me propongo con la estructura cooperativa que voy a utilizar.

Cuando hablamos de aprendizaje cooperativo no podemos dejar de acudir a lo escrito por Jonhson, D. W. y Johnson R. T. y por Pere Pujolás Maset, es por ello que, será la base de lo que os cuente.

Se distinguen tres tipos de agrupamientos:

  1.  Equipos base.
  2. Equipos esporádicos.
  3. Aulas puzle o Jigsaw Method.

EQUIPOS BASE. Se trata de una agrupación permanente. Se recomienda que se constituya entre 4 y 5 personas.

Si bien esto depende de la edad, según mi experiencia. Si nuestro grupo es de infantil es recomendable empezar por equipos de dos o tres personas, en caso de primaria los equipos ya podrían ser de tres o cuatro, en secundaria, sobre todo en 3º y 4º podrían ser de 4 o 5 personas y en FP o Bachillerato podrían llegar a 6. Creo que no debería superar este número, como se decía en el artículo «How to build a Great Team» de la revista Fortune. Si bien, esto es orientativo porque depende de la marurez, el tipo de tarea a realizar y del número de alumnos y alumnas que tengamos en el grupo.

En cuanto a cómo creamos los equipos base decir que, aunque nos recomiendan clasificar a nuestro alumnado entre el estudiante que puede ayudar, el que necesita ayuda o l@s que ni necesitan ni pueden ayudar, yo apuesto por realizar las agrupaciones en otro tipo de criterios. Las inteligencias o talentos múltiples y las diferentes habilidades de nuestro alumnado pueden servirnos para crear equipos heterogéneos que se complementen y ayuden a hacer aulas más inclusivas.

Para ello podremos utilizar sociogramas, registros de observación, test que valoren los distintos talentos como el inventario de Thomas Armstrong (2006) o instrumentos como las dianas de autoevaluación, en las que podrás evaluar los talentos que consideres necesarios en tu equipo de trabajo. Os dejo la que yo utilizo:

Diana de autoconocimiento by @Patrysa10

 

Si finalmente prefieres estructuras tus equipos clasificando a tus estudiantes entre los que necesitan ayuda, los que pueden aportarla y los que ni una cosa ni otra, si que te recomiendo que cuides mucho que tu alumnado no sepa de esta clasificación, recuerda el poder que tienen las etiquetas ( EFECTO PIGMALIÓN ). Deberás crear equipos heterogéneos incluyendo una persona que necesita ayuda, otra que puede aportarla y dos que ni una cosa ni la otra.

EQUIPOS ESPORÁDICOS. Se trata de agrupaciones temporales. El número de integrantes del equipo dependerá de la tarea a realizar y del contexto en el que se desarrolle la dinámica. No es necesario que los equipos sean heterogéneos, es por ello que podremos usar el azar para constituir el equipo. Yo utilizo este tipo de agrupación los primeros meses del curso escolar en los grupos que no conozco porque me aporta mucha información  sobre el alumnado y sus relaciones.

AULAS PUZLE O JISAW METHOD. Este método de agrupamiento se apoya sobre los equipos base y responde a una estructura cooperativa que pretende generar interdependencia positiva.

Para ponerla en práctica dividiremos la actividad a realizar en tantas partes como personas haya en nuestros equipos.

A cada persona, dentro de un mismo grupo/equipo, se le hará «experta» en una de las partes de modo que toda la actividad estaría cubierta por el equipo.

Una vez elegidas las personas expertas de cada equipo, éstas se agruparán por temática. Así, por ejemplo, si la tarea consiste en investigar sobre «los romanos» se establecerán diferentes subtareas en igual número que miembros del equipo. Por ejemplo, para equipos de cuatro personas podrían ser arquitectura, sociedad, legislación y cultura.

Los diferentes estudiantes expertos en «arquitectura romana» de los diferentes equipos cooperativos de la clase se unirán para realizar la investigación.  En esta fase, las personas expertas deberán investigar y solucionar la parte de la actividad asignada (p.ej. arquitectura romana) y asegurarse de que todas y todos las expertos han aprendido la solución (interdependencia positiva).

Una vez conseguido este reto, deberán volver a sus equipos base y procurar que todas las personas que componen su equipo aprendan y comprendan la parte que tenía asignada (arquitectura romana).

Este tipo de agrupamiento está indicado para grupos-clase que ya tienen algo de experiencia en el aprendizaje cooperativo y sirve para generar el sentido de interdependencia positiva.

 

Después de haber creado equipos cooperativos deberemos diseñar nuestra aula cooperativa, diseñar las estructuras cooperativas que vamos a utilizar, programar siguiendo la normativa, establecer una línea temporal de actividades de evaluación, seleccionar instrumentos y sistemas de evaluación y calificación… Pero esto lo dejo para otra entrada.

 

2 º PARTE EXPERIENCIA EN CARTAGENA. APRENDIZAJE COOPERATIVO: UNA FILOSOFÍA DE TRABAJO EN EL AULA

 

Considero que el aprendizaje cooperativo es la base que debe subyacer en toda estrategia educativa.  Es por eso que, siempre comienzo por esta metodología. 

Cuando hablamos de aprendizaje cooperativo no lo hacemos como sinónimo del tradicional «trabajo en equipo». Se trata de una estrategia que conduce al alumnado a desaprender los principios de individualismo y competición y a reaprender que los seres humanos somos más eficientes si cooperamos.

Cuando hablamos de aprendizaje cooperativo no podemos dejar de acudir a lo escrito por Jonhson, D. W. y Johnson R. T. y por Pere Pujolás Maset .

De Jonhson, D.W. y Johnson R. T. obtenemos la definición de lo que supone un aprendizaje cooperativo:

 

Aunque coloquialmente se confunden, el aprendizaje cooperativo no es sinónimo del colaborativo. 

Reflexionamos sobre los principios del aprendizaje cooperativo y señalamos que el diseño de nuestra programación de aula cooperativa debe poder superar el test de estos principios. Es necesario que se genere interdependencia positiva, se de igual participación, se distinga la responsabilidad individual y la grupal y el desarrollo de las actividades requiera de interacción simultánea.

¿Cómo transformamos un aula para llegar a un aprendizaje cooperativo? Si decidimos crear un aula cooperativa debemos empezar por el propio diseño del aula. La distribución de la misma debe invitar al aprendizaje en equipos cooperativos. Además, deberemos plantearnos la necesidad de crear agrupaciones y diseñar estructuras de aprendizaje cooperativo.

Podemos distinguir diferentes tipos de agrupamientos: equipos base, equipos esporádicos y equipos de expertos.

En cuanto a cómo creamos los equipos base decir que, aunque nos recomiendan clasificar a nuestro alumnado entre el estudiante que puede ayudar, el que necesita ayuda o l@s que ni necesitan ni pueden ayudar, yo apuesto por realizar las agrupaciones en otro tipo de criterios. Las inteligencias o talentos múltiples y las diferentes habilidades de nuestro alumnado pueden servirnos para crear equipos heterogéneos que se complementen y ayuden a hacer aulas más inclusivas.

Entre los instrumentos que podemos utilizar, en el taller utilizamos la diana de autoconocimiento.  Tuvimos que hacer un ejercicio de introspección y valorar nuestros niveles de diferentes talentos o habilidades.

Diana de Autoconocimiento. Autora Patricia Santos

 

Una vez creados los equipos, es necesario que fomentemos la identidad de equipo y la cohesión grupal. Para ello, podemos utilizar diferentes dinámicas según las necesidades contextuales.

Creados los equipos cooperativos deberemos asignar roles. 

Los roles son esenciales para determinar la responsabilidad individual, no existe aprendizaje cooperativo sin ellos. Además, provocan interdependencia positiva. En cuanto a cuáles son los que debemos de utilizar yo soy partidaria de contextualizar.

Una vez creado el equipo es importante que cada uno elabore y custodie el cuaderno de trabajo. En él, entre otras cosas, deberá contenerse los siguientes aspectos:

En siguientes entradas seguiré contando qué más vimos en el taller y os dejaré material del mismo.

CARTAGENA: METODOLOGÍAS ACTIVAS PARA FP BÁSICA

La pasada semana estuve en Cartagena, Murcia, para impartir un taller de metodologías activas.

El taller estaba enfocado a la Formación Profesional Básica, aunque también pudieron participar compañeras y compañeros de Secundaria. Cuatro sesiones de cuatro horas cada una suponían un reto para repasar todas las metodologías activas. Analizando las características del alumnado que habitualmente suele acceder a la Formación Profesional Básica, decidimos centrarnos en estrategias metodológicas que nos conducen a la educación del ser, el fomento de la inteligencia emocional y desarrollan la competencia de aprender a aprender; si bien repasamos las definiciones y aspectos fundamentales de algunas otras.

Como siempre, me llevé el frigo, donde l@s asistentes pusieron las expectativas y los objetivos con los que llegaban. 

Con esta dinámica pretendemos reflexionar sobre cómo las expectativas pueden condicionar la motivación y los comportamientos de los individuos (Vroom). A mi me parece muy interesante llevarla a cabo a principios de curso, así nuestro alumnado, deberá plantearse qué espera y cómo eso puede condicionar su comportamiento y nosotr@s, como docentes, también podremos valorarlo. Esta dinámica se cierra con una actividad al finalizar el curso escolar, donde l@s estudiantes podrán analizar si sus expectativas han sido satisfechas.

Después de esta actividad introductoria pasamos a la reflexión sobre los distintos tipos de estrategias metodológicas. Analizamos las características de metodologías centradas en los contenidos y las centradas en la acción.

Para ello utilizamos la dinámica cooperativa de controversia académica. Se hicieron dos grupos y cada uno tuvo que reflexionar sobre argumentos a favor y en contra de un cambio metodológico.

Esta dinámica nos invita a posicionarnos en criterios que no defendemos  y así podemos entender mejor los argumentos contrarios a nuestras ideas. Posteriormente, procedimos al debate y sacamos conclusiones. 

Para proseguir con la reflexión pudimos leer los siguientes mensajes: 

Confucio

Nuestras reflexiones nos llevaron a la necesidad de un cambio de paradigma, es necesario pasar del paradigma del contenido al paradigma de la acción. El aprendizaje competencial lo requiere. Esta fue nuestra conclusión.

Y ante estas conclusiones nos planteamos ¿cuáles son esas metodologías calificadas como activas? ¿qué tienen en común?. Sin pretender ser una enumeración exhaustiva, hablamos de las siguientes:

 

Y ante todas éstas, ¿cuál es la más idónea? Reflexionamos sobre la necesidad de valorar el contexto y nuestro perfil docente.

Otra de las cuestiones que nos planteamos venía referida a si el cambio de paradigma era debido a modas pasajeras y si tenía fundamento que lo sustentara. Repasamos aspectos relacionados con la regulación legal, las necesidades sociales actuales, las neurociencias y las corrientes psicopedagógicas.

 

 

Una vez decidid@s, empezamos a repasar y vivenciar el aprendizaje cooperativo. Pero esto lo dejo para la próxima entrada…

 

 

 

GAMIFICACIÓN: UNA ESTRATEGIA PARA MOTIVAR

Los pasados 9, 11, 23 y 25 de abril se desarrolló el Taller de Gamificación (actividad formativa organizada por el CEP de Marbella Coín de carácter provincial) en el IES Politécnico Jesús Marín de Málaga. 

Días previos al taller compartí en redes un vídeo que convocaba a los asistentes a  «Games of Edu-Throno». Os dejo el enlace:

Trailer Games of Edu-Thrones

El pasado martes 9 de abril tod@s l@s  convocados de Poniente acudieron al lugar señalado con muchas ganas de conseguir sentarse en el Edu Throno de lápices. Sólo aquell@s que demontraran gobernar las técnicas de motivación y aprendizaje podrían hacerlo.

El taller se planteó con una narrativa, un hilo conductor concreta: 

Para alcanzar el Edu Throno las diferentes familias trabajaron en formarse sobre aspectos básicos sobre gamificación y se batieron en «batallas singulares» obteniendo puntos individualmente que se ganaban para las diferentes casas. También pudieron obtener puntos extra a través de diferentes «easter eggs» que, en el desarrollo del taller, fueron apareciendo.

ScoreBoard preparado
Agrupaciones por «familias»

Para las batallas singulares utilizamos la aplicación «Kahoot» mediante la cual los habitantes de Poniente demostraron sus conocimientos técnicos sobre gamificación.

Os dejo parte de la presentación que utilizamos: 

 

 

 

Tras dos sesiones intensas de aprendizaje, el jueves 11 recibimos una noticia de la «Guardia de la Noche» que lo cambió todo. 

A causa de ello, quedamos convocados para el martes 23 para preparar la estrategia de batalla y encontrar las armas que nos llevaran a derrotar a los caminantes blancos.

Cuando acudieron los habitantes de Poniente les planteamos que necesitábamos los «huevos de dragón petrificados» y para conseguirlos vivimos un «Break-out Edu«.

Disco de cifrado
Descifrando las pistas

Teniendo ya las armas y habiendo recuperado los «huevos de dragón petrificados» sólo nos quedaba diseñar la estrategia de batalla (el proyecto gamificado para nuestra aula) y entrenar para la misma (vivenciar dinámicas aplicables en el aula).

 

 

Tengo que decir que Jonh Nieve (Manel) y Sansa (yo misma), encontramos a ciudadonos de poniente altamente cualificados, con grandes dosis de creatividad y competencia. Quedamos satisfechos porque claramente, l@s asistentes salieron como grandes expert@s (aunque me planeo que pudiera ser debido a que igual ya lo eran al entrar) en gamificación y en técnicas de motivación y desarrollo de competencias.

Quedamos a la espera de que compartan con nosotros los resultados de este entrenamiento.  Os dejo algunos de los mensajes que, en redes, han compartido l@s guerrer@s: