¿Qué pasa con el aceite de oliva?

El término grasa es muy genérico, se incluyen en él diferentes clases de lípidos, siendo los triglicéridos los más comunes, estos los habréis visto entre los diferentes apartados de un análisis bioquímico de sangre. Su consumo en exceso puede ser poco saludable, pero es bueno incluirlas en nuestra dieta en las cantidades adecuadas, entre otras razones para proporcionar ácidos grasos necesarios y favorecer la absorción de las vitaminas liposolubles (A, D, E y K). A los que se presentan en forma líquida se les llama aceites. Todas poseen una cantidad de calorías similar, como se puede ver en la tabla de la derecha.

En las últimas semanas se ha hablado mucho, tras las malas notas recibidas por el aceite de oliva y el jamón ibérico, del semáforo nutricional Nutri-Score, un nuevo etiquetado que pretende luchar contra la obesidad, un asunto problemático ya en países desarrollados y del que ya hemos tratado en este blog. Parece necesario la existencia de un etiquetado, como defiende una de sus creadoras en este artículo, aunque por otro lado recibe críticas pues también tiene sus detractores desde el campo científico.

El tema ya ha dado mucho juego en las tramas digitales, ya han aparecido comparaciones confusas e incluso algún bulo. Las páginas con verdades y mitos sobre el aceite de oliva sobreabundan, sus ventajas son claras y muchas de ellas están comprobadas científicamente, aunque no todas las que siempre se relatan. En este artículo tienes una información muy completa al respecto.

En cuanto al jamón que a veces le acompaña en nuestras tostadas: hoy no toca. Hoy solo llevará aceite, lo dejamos para otro día…

 

Resiliencia

Así nos la define la RAE: «Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.» Y si nos preguntamos cómo podemos ejercerla en estos pandémicos tiempos, nos encontramos respuestas de todo tipo. Os destaco algunos ejemplos que nos pueden ayudar:

Sarah Williamson

La muerte alrededor

Este pasado fin de semana me llamaba la atención un artículo en un diario digital con este titular: Anestesia general ante el récord de muertes de una tercera ola que aún no ha llegado a su pico. En él podemos leer cómo, a la vez que nos llega la información que la temible curva está bajando, el número de fallecidos no ha comenzado a bajar y sigue manteniéndose en el pico/meseta. Las comunidades ya piensan en relajar medidas y la posibilidad de una cuarta ola ya se deja ver. En este artículo podemos leer además esta frase «Una de las peores cosas que nos están ocurriendo es pensar que los muertos son solo una cifra que se da todos los días. No nos impactan, son como un daño colateral más» o esta otra «El decalaje (desajuste) que se produce con las muertes provoca que cuando llegamos al pico estamos saturados por los niveles de alerta máxima, lo que hace más difícil que influya en la gente y en los que toman las medidas de salud pública». En el artículo también se nos muestran otras cuestiones de interés, como cuáles son las formas más correctas de utilizar todos estos datos de mortalidad o sobre las medidas que se toman, no todas igual de útiles.

A partir de este artículo me gustaría compartir algunos enlaces de interés en torno a este tema: la muerte, que sigue siendo un tema tabú en nuestra sociedad a pesar de que en estos momentos está presente en nuestro día a día, y de forma continua en los medios de comunicación. Es una cuestión poco trabajada en las aulas, aunque con algunas experiencias interesantes. Si os interesa el tema, aquí tenéis algunas posibilidades para profundizar:

    • La muerte en en aula (Educa con TIC): Un primer artículo que recopilé hace ya bastantes años, pero que sigue teniendo vigencia y en el que podemos encontrar algunos enlaces de interés para tratar este asunto en medios educativos y familiares. Si hacemos una búsqueda se encontrarán algunos materiales interesantes más recientes, pero no demasiados.
    • ¿Nos estamos inmunizando al dolor de las muertes por la pandemia?, desde la agencia SINC nos intentan explicar los mecanismos de esta inmunización y cómo salir de la misma. No te asustes de los términos que utiliza, las ideas generales se entienden bien.
    • Si estáis interesados aún en el tema y queréis adentraros en el mundo de la tanatología comparada, adéntrate en Los animales entiende la muerte más de lo que se pensaba, en la página Cuadernos de Cultura Científica.

Cultura anticientífica

Un ligero vistazo a lo que está pasando, una mirada a la evolución de la opinión sobre las vacunas, un ratito viendo algún coloquio en una cadena de televisión, un paseo youtuber… nos hace evidente que no somos un país donde la cultura científica sea nuestro fuerte. Pero todo el mundo opina, tenemos una opinión sobre todo, decir «no sé» parece que no forma parte del lenguaje de ciertos personajes. Puede ser aconsejable ser escéptico, dudar, pero siempre y cuando no estén estas inquietudes basadas en la desinformación.

Algunos botones de muestra:

MALAGON_280620_NEGACIONISMO

Obesidad y dietas

En una de nuestras primeras entradas (La obesidad, una pandemia) escribíamos sobre las causas que han llevado a esta situación en la que la obesidad se considera uno de los grandes problemas de salud de la humanidad.
En la entrada de hoy queremos continuar con el tema porque hemos encontrado un interesante artículo en el que se entrevista a Marta González, experta en el tema. En el principio del mismo podemos leer este párrafo:

España se encuentra entre los países europeos con una mayor prevalencia de sobrepeso y obesidad en la infancia tanto en la etapa pre-adolescente, que va de los 5 a los 10 años de edad, como en la etapa adolescente, de los 14 a los 17 años de edad. Alrededor del 35% de los niños, niñas y adolescentes españoles tienen exceso de peso, un 20,7 % tienen sobrepeso y un 14,3% obesidad.

Nos ha interesado traerlo aquí porque en el citado artículo se dan algunos consejos interesantes:

  • Dar ejemplo de hábitos saludables tanto de alimentación como de actividad física (los hijos imitan a sus padres).
  • Establecer un horario regular para las comidas en familia.
  • Asegurar un ambiente relajado durante la comida, sin peleas.
  • Evitar distracciones como televisión, tablets, móviles o consolas.
  • Servir platos pequeños, sin rebosar, y no dejar la fuente de alimentos en la mesa para que se pueda repetir.
  • Involucrar a los niños en el proceso de compra de ingredientes y preparación de platos.
  • Planificar una compra saludable y menús semanales.
  • Servir únicamente agua para la hidratación, limitar zumos o bebidas refrescantes a ocasiones especiales.
  • Tener fruta siempre a mano y no comprar bollería ni pastelería industrial, ningún miembro de la familia la necesita.
  • Asegurar un buen aporte de vegetales como frutas, verduras, legumbres, frutos secos y cereales integrales.
  • Utilizar diferentes técnicas culinarias bajas en grasas como el hervido, plancha, horno, papillote o microondas.

Asimismo en la parte final nos  aclara el concepto de dieta y cómo deben hacerse.

Enlace al artículo completo

Divagar, perdonar, aburrirse

¿Qué pasa cuando tu mente divaga, te quedas como ausente y te pierdes sin rumbo fijo en tus pensamientos? La ciencia también intenta conocer estos procesos. Al parecer en la zona prefrontal de la corteza cerebral aumenta la actividad de los impulsos eléctricos que conectan unas neuronas con otras. Sugiere la investigación (de una universidad californiana) que se trata de una función necesaria del cerebro que puede promover la relajación y la exploración. Puedes leer más información en este enlace a Tendencias 21 (Pensar en las musañaras es necesario para el cerebro)

En otro estudio (en este caso llega desde la Universidad de Harvard) se  llega a la conclusión de que «el haber perdonado a otras personas se acompañaba de una mejor salud psicológica a largo plazo. Así, aquellas que tendían a ser indulgentes manifestaban menos síntomas de depresión y ansiedad, se sentían más felices y consumían menos alcohol». Más detalles de la misma, en este enlace a la revista Investigación y Ciencia.

Y por último, os recomiendo una lectura, pero no lo hagáis para combatir el aburrimiento, porque aburrirse también es bueno, no lo digo yo, entra en este enlace para verlo.

Dormir, comer, correr

Las investigaciones se multiplican, una de las últimas que nos llama la atención se ha realizado en la Universidad de Otago, en Nueva Zelanda, trabajando con jóvenes adultos se ha estudiado la influencia de determinadas variables (calidad del sueño, actividad física y tipo de alimentación) en la salud mental y el bienestar.

Según los resultados es la calidad del sueño el factor más determinantemente positivo, seguido de la cantidad del mismo y la actividad física. Solo el consumo de frutas y verduras se ha relacionado, en el terreno dietético, con una mejor salud mental.

Se puede considerar un sueño inadecuado como factor de riesgo para la salud física y mental (depresión y ansiedad). Por su parte, la actividad física libera endorfinas, neurotransmisores que ayudan a promover buenas sensaciones.

Enlace a la noticia en ALIMENTE

Pobreza energética y salud

La relación entre estas dos variables parece bastante evidente, al menos si hablamos de infecciones respiratorias, pero  además, puede haber una correlación en otros aspectos, según concluye la primera investigación realizada sobre este aspecto en el sur de Europa, llevada a cabo en Barcelona. Los parámetros analizados han sido: percepción personal de mala salud, asma, bronquitis crónica, depresión y ansiedad; en todos ellos se ha detectado una mayor prevalencia (superior en las mujeres) en casos de pobreza energética.

Si quieres conocer más datos, asómate a esta ventana.