Programa que surge de la Unión Europea para compensar las dificultades del alumnado provocadas por la pandemia. Consta de dos líneas de intervención, una dirigida a las familias y otra a la realización de modificaciones en el proyecto educativo, a las que se le dará respuesta en función de las necesidades del centro.
Nuestro centro se ha decantado por la del proyecto educativo.
La primera intervención dentro del proyecto educativo va dirigido a las medidas de atención a la diversidad. Nuestro centro trata de planificar las distintas opciones de los programas de refuerzo para el aprendizaje para el siguiente curso.
La segunda intervención a realizar, dentro de la educación para a la salud, será trabajar con nuestro alumnado la inteligencia emocional. Trataremos de dotarles de herramientas para que aprendan a gestionar las emociones, y el afrontamiento de situaciones estresantes como por ejemplo la pandemia.
La tercera intervención irá dirigida a la tutoría, orientación y convivencia. Nuestro centro va a realizar un análisis del estado de la convivencia a partir de los cambios producidos en nuestro alumnado tras el confinamiento. Se trata de adecuar las necesidades del alumnado a nivel de convivencia.
La cuarta trata de minimizar el absentismo. Para ello se realizará un seguimiento individualizado con la trabajadora social y el departamento de convivencia.
La quinta intervención trata de mejorar el programa de tránsito para minimizar las consecuencias negativas que podrían tener el alumnado en el cambio de etapa. En ella se mejorará las jornadas de puertas abiertas dirigida a los padres, se elaborará un tríptico informativo para los padres y se revisarán las actividades dirigidas al alumnado que transitan nuestro centro.
La última intervención va dirigida a adecuar la acogida de nuestro alumnado a las circunstancias actuales. Trataremos de recuperar las relaciones sociales y una adecuada autoestima.