CAMPOS DE GOLF EN EL DESIERTO. PREGUNTAS
Almería, 19 de agosto. 12.30 de la mañana y ya más de 30 grados. En este desierto, entre el saladar y la roca desnuda de las montañas, una superficie verde que parece mentira. Unos grandes chorros de agua a aspersión riegan el césped de un campo de golf.
En el lugar más seco de la península (menos de 300 mm anuales de lluvia al año), ¿se puede usar o, como bien dice Isidora, abusar de esta manera el agua?
Algunos piensan que sí, que con los campos de golf se atrae un turismo de calidad que genera muchos ingresos (consume mucho, necesita casa y genera construcción…)
El problema, sin embargo, es otro. ¿Hasta cuando se va a poder regar ese campo de golf? ¿De dónde se sacará el agua? (O se hará por medio de trasvases o tendrá que tomarse de las aguas subterráneas que se terminarán por agotar y provocarán un proceso de salinización, al ir entrado tierra adentro el agua marina)
¿Eso es sostenible a medio plazo? ¿Merece la pena el dinero que va a generar ese turismo si estamos destrozando para siempre una zona?
